"Era un hombre al que no le interesaba la oficina", dice Héctor Feliciano, amigo de Gabriel García Márquez y autor de Gabo periodista. El creador de Cien años de soledad prefería salir a la calle a buscar historias. García Márquez periodista, gestor de proyectos de cine, promotor del realismo mágico y cabecilla del boom latinoamericano, fue recordado esta semana en el festival que organizó la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano. El encuentro reunió en Medellín a escritores, periodistas y cineastas, a casi seis meses de la muerte del narrador colombiano, ocurrida el pasado 17 de abril. La ciudad protagonista, llamada de la eterna primavera, se caracteriza por su clima tropical, donde predominan la vegetación y el color rojizo de las fachadas de edificios y casas. La salsa suena en todas partes, desde la mañana hasta el anochecer.

Y a 20 años de la creación de la fundación que promueve, a través de talleres y cursos, el periodismo de calidad, la celebración fue en grande. Con más de 100 invitados de 20 países, 30 actividades gratuitas se desarrollaron en el centro de convenciones Plaza Mayor. "Celebramos el buen periodismo, celebramos a Gabo", dijo Jaime Abello, director de la fundación, que entregó en el festival los premios a los mejores trabajos en cuatro categorías, luego de recibir 1.400 postulaciones: texto, cobertura, innovación e imagen. En categoría texto, el premio recayó en "Exxon Valdez, una mancha de 25 años", del español Eduardo Suárez, que narra el desastre ecológico dejado por un barco petrolero en el norte del golfo de Alaska.

En el diálogo "Gabo periodista", se recordó la labor del Nobel en la redacción en diferentes medios de Colombia y México, además de evocar los últimos meses de vida del autor de El coronel no tiene quien le escriba. "El mayor premio que puede tener un periodista es ser releído. No ocurre mucho, pero la obra periodística de Gabo se relee", dijo el autor peruano Julio Villanueva Chang. Mientras Roberto Pombo, director del diario El Tiempo, citó una frase de García Márquez en uno de sus últimos encuentros. "Mejor despidámonos ahora, que para la próxima no te voy a recordar", señaló, aludiendo a los problemas de memoria que padecía. "No sé exactamente quién eres, pero sé que te quiero mucho", le dijo en otra oportunidad.

El realizador colombiano Sergio Cabrera subrayó la generosidad del narrador en la promoción de su trabajo, en películas como La estrategia del caracol. Vendrían más charlas con la participación de destacados autores, como Francisco Goldman, Martín Caparrós y Darío Arizmendi, quien se refirió a su nuevo libro, Gabo no contado, recién editado. En este volumen se reproduce su última entrevista para la televisión. Ahí dijo: "Quiero dar una entrevista en casa, al lado de la playa, que se vea el mar, y que la gente vea que la entrevista empieza a las cinco de la tarde y que se va oscureciendo, y que termine en la madrugada, con el amanecer".

Entre el calor de Medellín, el festival cerraba anoche con la presencia de Juan Villoro, Jon Lee Anderson y el cantante Rubén Blades.