Un fuerte sismo de 6,4 grados en la escala Richter azotó a Filipinas pasada las cuatro de la madrugada, hora local y se ubicó 126 kilómetros de la ciudad de Dumaguete, en la Isla de Negros, a una profundidad de 21 kilómetros.

Posteriormente, menos de 20 minutos después, una réplica de 5,1 grados Richter, se sintió en la misma zona. Se ubicó a 127 kilómetros de Dumaguete y a 114 de Iloilo, Panay, a una profundidad de 70 kilómetros. Este movimiento fue acompañado por otro de 4,9 grados registrado minutos más tarde, según detalló el Instituto Geológico de Estados Unidos.

No se reportaron daños, ni víctimas y hasta el minuto no se activó alerta de tsunami.