A esta hora, #MiracleInMonaco (Milagro en Mónaco) es una tendencia en Twitter. No tiene que ver con algún suceso religioso que haya ocurrido en el principado de Francia, sino con un partido de fútbol que se jugará hoy y que llevará la etiqueta de la Champions League. Arsenal visita al equipo homónimo de la ciudad con desventaja matemática en el marcador global, pero con la ilusión de medio Londres a cuestas.
La fanaticada de los Gunners no pierde la fe en que es posible revertir el 3-1 encajado en la ida y continuar con vida en el torneo continental. Así, el plantel, que viajó ayer por la mañana a tierras francesas, se vio animado y sonriente a la hora de abordar el avión, sabiendo del cálido respaldo de su público que, pese a los tropiezos en la temporada, aún mantienen un voto de confianza sobre ellos.
El hashtag toma fuerza en Twitter, acompañado de arengas para los jugadores, fotos, y recuerdos de algunas hazañas del cuadro londinense que podrían ser emuladas esta tarde. Entre ellas, destaca lo que sucedió en la temporada 2003-2004 en la misma competición, cuando, en la fase de grupos, Arsenal dio cuenta de su grandeza y humilló al Inter de Milan en su visita a San Siro y lo goleó por 5-1, luego de haber caído por 3-0 en casa durante la ida.
Eso sí, con la pelota al piso, hay varios motivos para dudar de lo que puede lograr el elenco que dirige Arsene Wenger. Marchan en el tercer lugar de la Premier League, pero una serie de pinchazos a lo largo del semestre le han privado de pelear mano a mano por la corona inglesa, tal como el técnico francés prometió en el inicio de la temporada. Por otro lado, su suerte en la Liga de Campeones durante los últimos años tampoco da para mucho. El último antecedente de una campaña exitosa data del 2006, cuando alcanzó la final de la competición, para luego caer a manos del Barcelona de Frank Rijkaard, que se alzó con el trofeo.
De cualquier manera, la ilusión está intacta y las esperanzas de la parcialidad gunner reside, principalmente, en lo que pueda hacer el chileno Alexis Sánchez, que comandará la ofensiva del equipo junto a Mesut Ozil, Theo Walcott y Olivier Giroud. "Lo recordarán por siempre", insisten en Londres. Mónaco, en tanto, también sabe que se juegan el partido de su vida. Las cartas ya están echadas y sólo resta por esperar el pitazo inicial. A las 16.45 es la cita.