Amelia Bannan tenía seis meses de embarazo cuando sufrió un accidente de tráfico el 1 de noviembre pasado en un lugar muy cercano de Posadas, en la provincia de Misiones, Argentina. La trasandina quedó con graves lesiones cerebrales y en estado de coma, y no mostró nunca síntomas de pérdida.
Tras el accidente estuvo seis meses en coma debido a un grave traumatismo cranoencefálico, y durante los primeros tres meses su bebé seguía creciendo en su vientre con normalidad. En Navidad despertó de la inconsciencia por las contracciones, el bebé iba a nacer. Como no dilataba, le realizaron una cesárea de urgencia.
El 24 de diciembre nació Santino, sano y sin ningún problema de salud, pesó 1,89 kilos y permaneció un mes en la unidad de cuidados neonatales, sin embargo Amelia no despertaba del coma y sus señales vitales eran débiles.
Mientras Amelia aún permanecía inconsciente, los familiares de la mujer le mantuvieron contacto permanente con el bebé durante tres meses y medios. Hasta que un 8 de abril, luego de que los especialistas y cercanos vieran signos de recuperación, despertó del coma.
En un principio le contaban cosas a Amelia sobre su hijo aunque la respuesta fuera nula, hasta que un día contestó un "sí", "Amelia estás escuchando", le volvieron a preguntar y volvió a decir que sí, relata el medio argentino El País.
Hoy en día Amelia mejora con rapidez al lado de su hijo, mueve sus cuatro extremidades y puede hablar un poco. A pesar de las dificultades que ha conllevado como por ejemplo recuperar la memoria, su principal motor es Santino, al que según relata sus familiares, lo besa y acaricia.