Mañana se cumple el plazo final que tienen las sociedades anónimas para enviar a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) las respuestas de sus cuestionarios respecto de la norma de carácter general 341 sobre autorregulación y buenas prácticas de gobiernos corporativos, que entró en vigencia este año.

Hasta anoche habían enviado sus respuestas a la autoridad unas 167 firmas. Con esta muestra comienzan a vislumbrarse las primeras tendencias.

Una de ellas es que sólo 9% de las sociedades contestó que ha establecido una política mediante la cual se propone a los directores destinar un tiempo mínimo mensual exclusivo para ejercer sus funciones; el 82,9% restante que no ha adoptado esta práctica entregó una justificación al regulador.

"Este resultado está entre lo esperado ya que, en general, está instalado el concepto de que los directores se deben a la empresa en todo momento, y resulta poco práctico establecer tiempos de dedicación mínimos" indicó Arturo Platt, socio director de Gobiernos Corporativos de Deloitte.

"Personalmente, estimo que este tipo de políticas no es de práctico uso, más todavía cuando por los niveles de responsabilidad que enfrentan cada día más los directores, es casi imposible pensar en que cada uno no hará un análisis personal y responsable del tiempo que requiere para cumplir en forma su rol de director", agregó.

"No me extraña la respuesta, era totalmente esperable", indicó Renzo Corona, socio líder de auditoría de PwC Chile, a esta política. "Creo que no tiene ninguna importancia y es muy difícil establecer un horario mínimo mensual, finalmente el tiempo que un director debe dedicar es variable, depende tanto de las características y habilidades de cada director como de otras condiciones de mercado que son inminentemente cambiantes", puntualizó.

Arturo Platt explica que la norma "es una iniciativa que pretende dar una guía, que recoge muchas recomendaciones que son una suma de lo que se hace en otros países, las recomendaciones de la Ocde, y la experiencia práctica".

Entre las sociedades que respondieron que han adoptado esta política figuran Cencosud, Soprole Inversiones, Rebrisa, Cruz Blanca Salud, Empresas Iansa y Masisa y Cementos Bío Bío.

Otras consultas

El cuestionario incluye 19 consultas sobre prácticas de gobierno corporativo, políticas del directorio, información a accionistas, sistema de compensaciones a ejecutivos y controles internos.

A cada pregunta las sociedades respondieron si adoptaron o no, explicando su opción en prácticamente todas las respuestas.

De estas 167 sociedades, 59,3% respondió que el directorio sí se rige por un Código de Conducta y el 40,7% restante contestó que no. La SVS indica que para responder afirmativamente a esta consulta, el código debe identificar las principales situaciones que configuran un conflicto de interés, describir el procedimiento que debe seguir un director para declarar y resolver un conflicto de interés, entre otros.

El regulador también recomendó mencionar, en caso de que cumplan con esta práctica, si está o no a disposición de los accionistas y el público en general.

Al consultarles si el directorio cuenta con un procedimiento para facilitar el adecuado funcionamiento de la sociedad ante el reemplazo o pérdida del gerente general o ejecutivos principales 66,5% respondió que sí y 33,5% dijo que no.