Entre 25 mil y 30 mil personas se manifestaron hoy en Malasia para exigir elecciones libres, así como el fin de la corrupción y fueron reprimidas por la policía con gases lacrimógenos y carros lanzaagua, informaron los medios locales.
Los manifestantes, convocados por el grupo Bersih, se reunieron en torno a un parque en el centro de la capital, Kuala Lumpur, que había sido acordonado por la policía. Según los medios, algunas personas, que reclamaban la actualización de los padrones y un acceso igualitario de todos los partidos a los medios, lograron pasar las barreras.
Cuando la policía reprimió de forma violenta la protesta, muchos salieron corriendo en medio del pánico y otros se refugiaron en tiendas cercanas.
El gobierno desplegó cientos de policías y varias calles estuvieron cerradas al tráfico. "Se roció sin advertencia previa a mujeres y niños con gas lacrimógeno", aseguró Augustine Loorthusamy, presidente de la organización de medios católicos Signis. "Lo único que queremos son elecciones libres y transparentes".
No hubo confirmación oficial sobre heridos o detenciones. Las próximas elecciones en el país del sudeste asiático deben celebrarse como muy tarde antes de mediados de 2013. Hay sin embargo especulaciones acerca de que se podría votar este mismo año.
El gobierno de Malasia viola los derechos y libertades de la población, dijo el vicedirector para Asia de Human Rights Watch, Phil Robertson. El primer ministro, Najib Razak, dijo por el contrario que las autoridades no prohíben las manifestaciones, sino que exige que se realicen en las zonas autorizadas.
También en otras ciudades hubo protestas. En julio del año pasado el policía disolvió violentamente una protesta en Kuala Lumpur con decenas de miles de participantes y detuvo a 1.600 personas.