Los últimos casos de abusos sexuales contra menores han provocado un colapso en el sistema tanto escolar como judicial del país debido a la extensa cantidad de investigaciones que manejan los fiscales, por ejemplo. Conocidos se han hecho casos como el del colegio Cumbres, Apoquindo, Mater Purísima, entre otros, cuestionando la labor de la autoridad en cuanto a prevención y castigo por delitos que alcanzaron a las 1.682 denuncias en Carabineros durante el primer semestre.
Ante este escenario, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) saca la voz y señala que "hay deficiencias importantes" en cómo las autoridades abordan los casos de delitos sexuales en contra de menores.
Los procesos habituales que un menor debe seguir al momento de denunciar un abuso ya sea a sus padres, profesores o la autoridad, son catalogados por Unicef Chile como "traumantes". Esto, debido a que el sistema chileno le hace recordar al menor "una y otra vez la experiencia para lograr una sanción al agresor. No hay una finalidad mala, seguro, pero el resultado es un daño muy importante a un niño", le dice a La Tercera, Soledad Larraín, especialista de la Unicef en Chile, encargada del Area de Protección al Menor.
Ante este escenario de aumento de denuncias por parte de las víctimas, Unicef evalúa el trabajo de las instituciones que tratan con los niños al momento de recibir una denuncia. "Se ha ido cambiando la forma de cómo abordar los abusos sexuales en los últimos años porque, por ejemplo, hace 10 años, era un delito en contra de la honra y buenas costumbres. Hoy es un delito contra el derecho a una sexualidad libre sin presión. Por otro lado, por primera vez se ha escucha a las víctimas a raíz de casos connotados. La gente se atreve más a denunciar", dice Larraín.
Además señala sobre la explosión de casos que "no se puede decir con certeza si hay un aumento porque aún no hay estudios. Sí hay más denuncias, eso es importante, se plantea que por cada denuncia hay 7 que no quieren acusar. Se hace cuando sucede en niños pequeños por el rol de los terceros. El rol de los terceros es relevante porque van a ser los profesores, padres, personal de salud, quienes detecten situaciones. Creo que este aumento obedece que hay más preocupación, más detección y atención a los niños. Dicho eso, nosotros hemos considerado y planteado que aún hay deficiencias importantes en la respuesta del Estado en relación al tema del abuso sexual".
LAS FALLAS DEL SISTEMA
Pero a pesar del aumento en denuncias, Larraín señala que hay fallas severas para evitar, manejar y mejorar cómo se abordan los casos de abusos infantiles, en los que se les está haciendo daño a los menores, por ejemplo, haciéndoles más de una entrevista para capturar su relato de un eventual abuso.
"En ese punto, este país está muy atrasado. Tenemos que avanzar en la entrevista única, en que el niño pueda declarar una vez, videado, con todos los que deban estar, y que esa entrevista tenga valor y que no se dude del testimonio", dice Larraín, confesando que "estaba con una psicóloga, que trabaja en tema de credibilidad del relato, que estuvo en una conferencia en Brasil. Allá no entendían a qué se dedicaba ella, que por qué le hacen credibilidad de relato a un niño. En otros países, obviamente que bajo ciertas condiciones por cierto, se cree en el testimonio del niño. Creo que ese tema y cambiar la cultura que parte dudando de los niños es fundamental".
Otro punto, según Larraín, es que apenas alrededor del 10% de los casos llegan a juicio oral, por lo que el restante porcentaje pasa por traumas sin siquiera conseguir resultados o criminalizar a los autores de los delitos.
FALTAN RECURSOS Y PREVENCION
"Hay muy pocos recursos, esto se traduce en que no hay dinero ni para peritajes. Entonces, los niños deben esperar por trámites que deberían ser inmediatos. Es una obligación del Estado, de acuerdo a lo que plantea la convención de abusos sexuales contra menores, que la reparación, por ejemplo, también es responsabilidad del Estado. Chile tiene como obligación pagar reparos por casos de abusos sexuales", dice la consultora Unicef para Chile
Concluye que el tema de trabajo de prevención tanto del Gobierno como de los colegios es deficiente. "Otro tema relevante es que el tema de prevención. Actúan de reacción, cuando pasa algo aparecen los protocolos, etc. No es una medida mágica la que lo previene. Es un trabajo integral. Las rejas, ventanas, etcétera, no va a hacer que se eviten los abusos, es parte de un trabajo. No hay que pensar que por poner cámaras está todo solucionado", remata.