La agencia de la ONU para la infancia exhortó el jueves a celebrar el 20mo aniversario de un tratado sobre derechos de los niños trabajando juntos para ayudar a los 1.000 millones de menores que pasan privaciones y a millones más afectados por la violencia.

En ocasión del aniversario, la Unicef emitió un reporte sobre los retos que se avecinan y los logros desde que la Asamblea General de la ONU adoptó en 1989 la Convención de Derechos del Niño.

La directora ejecutiva de la Unicef, Ann Veneman, dijo que la marcada declinación en las muertes infantiles es un "logro admirable". Elogió también el número de niños en escuelas primarias, los más de 70 países que usaron el tratado para incorporar derechos infantiles en sus leyes nacionales, y la nueva dedicación a proteger a los menores de "violencia, abusos, discriminación y explotación".

Pero Veneman dijo que "es inaceptable" que más de 214.000 niños menores de cinco años mueran diariamente de causas previsibles, como neumonía, malaria, sarampión y desnutrición. Y lamentó los casi 200 millones de niños que están crónicamente desnutridos, los más de 140 millones forzados a trabajar, y los millones de niñas y niños de todas edades sujetos a violencia sexual.

"Cuando llega a su final el primer decenio del siglo XXI, la convención está en un momento clave", dijo en una conferencia de prensa para presentar el reporte.

"Su relevancia sigue siendo atemporal. El reto para los próximos 20 años es mejorar los progresos conseguidos, trabajar juntos para ayudar a esos niños a quienes aún se niega el derecho a la supervivencia, desarrollo, protección y participación", afirmó.

La convención tiene el apoyo más amplio de cualquier tratado, de 183 países, aunque Veneman dijo que no todos están implementando sus requerimientos. Solamente dos países _Estados Unidos y Somalia_ no lo han ratificado.

El gobierno de Bill Clinton firmó la convención en la década de 1990, pero no la presentó al Senado estadounidense para su ratificación porque varios grupos argumentaron que infringía los derechos de los padres y contradecía leyes estatales y locales.

El presidente estadounidense Barack Obama y la embajadora de ese país ante la ONU han expresado sus deseos de llevar al país "en dirección a la aprobación" del acuerdo, dijo Veneman.