El único condenado por el atentado de Lockerbie, el libio Abdel Bassit Ali Mohammed al Megrahi, renunció oficialmente a la apelación que tenía previsto realizar contra su condena a cadena perpetua por el atentado, informó hoy un tribunal de Edimburgo.
Jueces del Alto Tribunal en Edimburgo accedieron a la petición de Al Megrahi de renunciar a su apelación después de tener conocimiento de que al hombre de 57 años, que sufre de un cáncer terminal de próstata en estado avanzado, no le queda mucho tiempo de vida.
Al Megrahi fue condenado en 2001 por el atentado contra el avión de la aerolínea PanAm que en 1988 dejó 270 muertos al explotar y precipitarse sobre la localidad escocesa de Lockerbie.
Antes de finalizar el mes, Libia decidirá si solicitar su indulto o su extradición, añadió el tribunal.
Con su renuncia a la apelación, Al Megrahi salva un obstáculo para su extradición. El traslado a Libia, donde cumpliría el resto de la condena, no podía realizarse mientras quedara un proceso pendiente en Reino Unido. Un posible indulto, por el contrario, sí podía ordenarse incluso aunque se mantuviera la apelación.
El gobierno británico dijo que no hay obstáculos legales internacionales que impidan que el gobierno escocés, independiente en materia judicial, devuelva a Al Megrahi a Libia. "Su absoluta prioridad en el poco tiempo que le queda es pasarlo con su familia en su país de origen", dijo la abogada del libio, Margaret Scott, al tribunal.
El estado de salud de su cliente recientemente se ha deteriorado "de forma muy considerable", sostuvo.
El hecho de que Al Megrahi haya tenido opción a apelar se debe al fallo de una comisión de investigación que, junto con observadores legales de Naciones Unidas, manifestó dudas sobre las pruebas en el proceso que terminó en su condena.
Parte de los familiares de las víctimas británicas en el atentado terrorista esperaba que se abriese un procedimiento de apelación y que con ello obtuviesen más información acerca del trasfondo del crimen. Algunas voces críticas han llegado a insinuar que se ha ejercido presión sobre Al Megrahi para evitar que se abriera un nuevo proceso.
Los medios especularon recientemente acerca de que el libio podría ser liberado a finales de esta misma semana, antes de que comience el mes de ayuno musulmán del Ramadán.
A diferencia de los allegados de víctimas británicas, la mayoría de familiares de las 189 víctimas estadounidenses en el atentado reaccionaron con indignación ante la posibilidad de una puesta en libertad anticipada.
También la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, y varios senadores estadounidenses habían exigido que Al Megrahi cumpliese toda la condena por su implicación en el atentado con bomba.
Debido a su enfermedad mortal, el autor del atentado había solicitado el indulto. Asimismo, el gobierno libio había demandado la extradición de Al Megrahi, para que cumpliera el resto de su condena en Libia.
Este país asumió oficialmente en 2003 la responsabilidad de la muerte de las 270 personas y se hizo cargo de las indemnizaciones a los familiares. Más tarde, el gobierno libio señaló que se había aceptado la responsabilidad sólo para que Naciones Unidas levantara las sanciones.