A poco más de una semana de que los británicos votaran que quieren salirse de la Unión Europea (UE), Bruselas está adoptando una postura más dura frente a cualquier país que intente poner en riesgo sus pilares fundamentales. Así, según explica el diario The Guardian, el bloque mostró su determinación de no hacer concesiones a Reino Unido sobre los términos que se negociarán del Brexit, al decirle a Suiza que perderá acceso al mercado único si continúa con sus planes de imponer controles sobre el libre movimiento de los ciudadanos comunitarios.

En febrero de 2014 los suizos aprobaron,  mediante un referendo con 50,3% de los votos, volver a limitar la entrada de ciudadanos de países de la UE a su mercado laboral, a través del establecimiento de cuotas anuales que deberán aplicarse en febrero de 2017.  La iniciativa propuesta por el  partido de extrema derecha, Unión Democrática de Centro (UDC), restableció -además- el principio de la preferencia por el trabajador nacional frente al extranjero, que se encontraba abolida para todos los trabajadores procedentes de alguno de los países de la Unión Europea. Según señala la agencia Reuters, luego de la llegada de más de 100 mil europeos en 2015, actualmente viven 1,5 millones de ciudadanos del bloque, al que Suiza no pertenece, pero con el que tiene una serie de acuerdos bilaterales.

En marzo de este año los suizos dieron a conocer una serie de medidas para controlar los flujos migratorios,  lo que violaría acuerdos bilaterales clave en esta área. Las conversaciones entre Bruselas y Berna estaban estancadas hasta que se realizara el referendo en Reino Unido, donde uno de los temas importantes fue justamente la migración de ciudadanos europeos. De acuerdo a The Guardian, las conversaciones entre Suiza y el bloque deberían retomarse pronto, debido a que políticos helvéticos deben aprobar una serie de leyes antes de febrero de 2017, fecha límite en el que se debe aplicar la propuesta del referendo de 2014.

El diario señala que los suizos son más dependientes de la UE, que viceversa, por lo que su posición para cualquier negociación es más débil. De hecho, exporta el 56% de sus bienes a la UE.

Así, según los analistas, el gobierno suizo no tiene muchas opciones  y, en lo que es visto como una advertencia para los británicos, puede que no tenga otra alternativa que perdirle a los votantes que reconsideren su decisión de hace dos años.

Suiza es uno de los modelos que quienes respaldan el Brexit han señalado como uno de los caminos a seguir, debido a que consideran que tiene una economía bullante al estar fuera de la UE.

Los líderes europeos han dicho que pedirán condiciones similares  a la que tienen los suizos sobre la libertad de movimiento, si los británicos consiguen retener un fácil acceso al mercado único durante las negociaciones entre Londres y Bruselas para la salida de la isla del bloque. En todo caso, funcionarios británicos han reconocido que es difícil limitar la migración al punto que los electores brexistas quieren y mantener el libre comercio que se necesita.