La Unión Europea (UE) acordó hoy formalmente ampliar seis meses, hasta el próximo 15 de septiembre, las sanciones comunitarias a 150 dirigentes rusos y líderes separatistas ucranianos y a 37 empresas por desestabilizar Ucrania.
Las restricciones consisten en la prohibición de la entrada a territorio comunitario y la congelación de activos de los afectados.
El Consejo de la UE explicó en un comunicado que esta decisión da efecto legal a la decisión política adoptada por los ministros de Exteriores el pasado 29 de enero.
Los detalles de la lista de sancionados serán publicados el sábado en el Diario Oficial de la UE.
En el listado en vigor hasta ahora estaban incluidas personas del entorno del presidente de Rusia, Vladímir Putin, como el viceprimer ministro, Dmitri Rogozin, y rebeldes prorrusos como el mando de la Flota del Mar Negro, vicealmirante Aleksandr Vitko, y el primer ministro de Crimea, Serguéi Axiónov.
Los líderes europeos tratarán el posible endurecimiento de las sanciones contra Rusia en su reunión del 19 y 20 de marzo en Bruselas, aunque fuentes comunitarias aseguraron a Efe que incluso los países que mantienen un línea más dura contra Rusia consideran que ahora no es el momento de dar un paso más en las sanciones.
Las mismas fuentes destacaron que la UE está pendiente de que se cumplan los acuerdos de Minsk y se respete el alto el fuego al que se comprometieron Rusia y Ucrania el pasado 12 de febrero.
Hasta ahora los países que se han mostrado más duros con respeto al tratamiento que debe recibir Rusia son bálticos, Polonia, escandinavos y el Reino Unido, mientras que los mediterráneos, como España, han mantenido una posición más suave.
La posición de Alemania y Francia es particular porque son ellos los que mediaron en las negociaciones del acuerdo de Minsk, por lo que están muy interesados en lograr que se aplique y en dar un poco de margen antes de decidir pasar a sanciones de carácter económico, continuaron.
La aprobación de sanciones requiere un apoyo por unanimidad de los Estados miembros.