Impacto causó la decisión de la red de universidades no estatales (G9) del Consejo de Rectores (Cruch) de no asistir a la reunión mensual, en la cual tradicionalmente participan todos los representantes del organismo. Este quiebre se produce en una semana clave tanto para la reforma a la educación superior como para el sistema, ya que, por un lado, el gobierno debe llegar a acuerdo para presentar las indicaciones, y, por otro, se entregan los resultados de las postulaciones vía PSU.
El G9, mediante una carta firmada por su presidente, Claudio Elórtegui, le comunicó oficialmente al rector Aldo Valle, vicepresidente del Cruch, que el Consorcio de Universidades Estatales (Cuech) habría realizado "acciones que tienden a favorecer a unas instituciones por sobre otras, forzando un trato desigual de parte del Estado hacia los planteles del G9". Con ello, se alude a la discusión presupuestaria y a la redistribución justa del Aporte Fiscal Indirecto (AFI), que fue eliminado.
Sin embargo, desde el Consorcio de Universidades del Estado (Cuech) se mostraron en desacuerdo con esto. "Hemos apoyado lealmente al G9, no hemos planteado ningún conflicto, los hemos defendido en los momentos en que se ha requerido y hemos apostado por la unidad", señaló el rector de la Universidad de Chile y presidente del Cuech, Ennio Vivaldi.
En ese sentido, el rector de la Universidad de Talca y miembro del directorio del Cuech, Alvaro Rojas, aseguró "están dirigiendo mal su enojo, porque decidir eliminar o no el AFI no es algo que decide el Cruch o el Cuech, sino el Mineduc y Hacienda".
Rojas también remarcó que no ha habido deslealtades: "Hemos aplicado fair play. El Cuech tiene una estructura propia de Arica a Punta Arenas, también tiene conversaciones con el Estado y no veo que tengamos que pedir permiso o autorización para eso. Somos autónomos y además funcionarios públicos; si nos llaman del Mineduc, tenemos que ir".
Precisamente, estos días el Mineduc se encuentra trabajando en las indicaciones a la reforma. "Restablecer el clima al interior del Cruch es indispensable para este momento, para sacar adelante la reforma", señaló el rector Aldo Valle. El rector Vivaldi coincidió en que "es un momento muy importante para buscar la unidad del Cruch, no su división", mientras que el rector Rojas advirtió que "la división del Cruch no es halagüeña para su sustentabilidad".
En tanto, la ministra de Educación, Adriana Delpiano, que por ley es además la presidenta del Cruch, subrayó que los planteles tradicionales "tienen un conflicto que es interno" y añadió que "lo resuelvan los rectores, pues tienen autonomía".
La carta
La misiva del G9 señala que la red ha iniciado un período de reflexión y explican que, pese a que valoran las gestiones del rector Valle y manifiestan su apoyo al Cruch, "se han producido desencuentros reforzados por algunas declaraciones del Consorcio de Universidades Estatales, las cuales estimamos no contribuyen a crear clima de unidad".
Además de las acciones que generaron trato desigual, la carta consigna que entre lo que ha suscitado desacuerdo figura un "desconocimiento del rol público que caracteriza a todas las instituciones del Cruch" y una "minimización del trabajo conjunto actual e histórico que han desarrollado nuestros planteles".
Todo esto "perturba el trabajo colectivo que desarrolla el Cruch, el cual debe ser revisado por todos sus miembros con altura de miras". En ese sentido, el documento propone una agenda de trabajo conjunta que contemple "encuentros bilaterales entre rectores de la red G9 y el Cuech para avanzar en soluciones".