En momentos en que el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, llama a parar el "tsunami humano" de miles de inmigrantes que escapan de los países de la orilla meridional del Mediterráneo, por los conflictos locales, y llegan, por ejemplo, a la isla de Lampedusa, sur de Sicilia, la organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF), alertó por la situación precaria de las condiciones higiénicas en que permanecen los inmigrantes.
Las condiciones son "intolerables" y "no cumplen con los estándares humanitarios", dijo MSF. En estos momentos 3.000 inmigrantes comparten 16 baños químicos en el puerto, donde sólo hay dos camiones cisternas con agua disponibles, y las autoridades sólo entregan litro y medio por persona al día.
"Cuesta creer que algo así ocurra en Italia. Las condiciones de vida son peores que las que se pueden observar en los campos de refugiados en los que prestamos asistencia en todo el mundo", indicó el director de MSF Italia, Kostas Moschochoritis.
La responsable médica de los proyectos de MSF en Italia, Barbara Maccagno, aseguró que "las malas condiciones sanitarias podrían facilitar el desarrollo de enfermedades infecciosas".
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, expresó hoy a Berlusconi en una conversación telefónica el empeño de la institución por desarrollar "una solidaridad más eficaz" con Italia, según una nota de la presidencia del gobierno italiano.
Ambos mandatarios concordaron en que la emergencia que se vive en Italia, adonde han llegado alrededor de 22.000 inmigrantes en el último mes y medio, es un problema que concierne a toda Europa y que "debe ser afrontado y resulto a nivel europeo". Berlusconi viajará el próximo lunes a Túnez para tratar la cuestión migratoria con las autoridades locales.