Llegan solas o acompañadas de amigas. Por iniciativa propia o derivadas tras una consultoría profesional. Y así, en sólo siete años, los menores de 15 años se convirtieron en el grupo etario donde más ha crecido el uso de métodos anticonceptivos que se entregan en los recintos públicos del país.

Así lo confirma un estudio del Ministerio de Salud, que demuestra que los adolescentes que conforman el programa de control de natalidad aumentaron un 400%, pasando de 2.831 en 2005, a un total de 12.767 al cierre de 2012.

Sylvia Santander, jefa del departamento de ciclo vital del Minsal, explica que el alza responde a una mejora en la detección de las conductas sexuales tempranas y a la captación y retención de las menores en los recintos de salud públicos.

"Hace tiempo veníamos con el problema del embarazo juvenil y veíamos con preocupación las cifras, especialmente en menores de 15 años, donde el convertirse en mamá es muy complejo. Lo que hicimos fue diseñar una estrategia que busca, primero, saber cuál menor empezó su actividad sexual o está cerca, para guiarla a que tome las prevenciones sanitarias del caso", explica Santander.

Entre las medidas destaca el "control del joven sano", programa que traslada al personal de salud a los colegios para monitorear indicadores de salud física, mental y conductual. A eso se suma la apertura de 100 "espacios amigables" en los consultorios, diseñados para la atención de jóvenes, considerando sus horarios y consultas más frecuentes.

"No se trata de incentivar la vida sexual de los jóvenes, pero sí de anticiparse a los riesgos y educarlos para que adopten conductas correctas. Para eso se les hace una consultoría que varía según su etapa de desarrollo y los temas necesarios de abordar, que puede ser recomendarles retrasar el inicio sexual o protegerlos frente a eso", dice Santander, quien afirma que la última medición ya arroja una reducción del embarazo en las menores de 15 años, con 874 nacimientos en ese grupo durante 2012.

PILDORA DEL DIA DESPUES

En cuanto a la anticoncepción de emergencia, el informe del Minsal revela que el uso de este mecanismo subió de 1.151 entregas del fármaco a menores de 19 años durante 2005 a 3.024 en 2012.

ENTREGA DE LA PILDORA

Respecto de la forma de entrega de "la píldora" -que ha suscitado una controversia tras un dictamen de la Contraloría que refuerza la comunicación posterior de esta distribución a padres o apoderados de la solicitante, cuando sea requerida por una menor de 14 años-, Santander sostuvo que el fármaco se entrega a todo quien lo solicite, sin condiciones.

"La ley indica que la píldora se entrega al solicitante, y eso no condicionarse. Si es adolescente, se le entrega y luego se informará a un adulto responsable que ella indique. La ley garantiza la protección de salud de la menor y nosotros no tenemos problemas con eso", afirma.

Por su parte, la presidenta del Colegio de Matronas, Anita Román, afirma que los menores son cada vez más responsables e independientes en materia de control de natalidad, pero que este cambio no va de la mano con generaciones más antiguas. "Los jóvenes se han empoderado, llegan a los consultorios, piden la píldora y saben que tienen ese derecho. El rol que nosotros jugamos ahí es educarlos en materia sexual y reproductiva y hacer que la ley se cumpla. Es cierto que los padres tienen derecho a saber, pero también tienen deberes, y cuando nos llega una niña de 11 años pidiendo anticoncepción, no es con permiso de los padres", dice Román. Añade que la entrega de estos fármacos se realiza en complicidad con los menores: "Hay una ley que nos obliga a entregar los anticonceptivos y que es la niña quien debe decirnos a quien informar. A veces es una amiga, a veces una prima o una tía. Lo importante es la protección, porque no puede venir un tema valórico pasar a llevar una política sanitaria".

En tanto, el presidente de la Comisión de Salud de la Asociación de Municipalidades, Felipe Delpin, dijo que los ediles harán una nueva presentación ante Contraloría. "Hay dudas entre los alcaldes y hay algunos que dicen que antes de la entrega de la píldora debe notificarse a los padres de las menores. Por eso, queremos que la ley se mantenga y que se clarifique", añadió