La vacuna contra el dengue, que desarrolla el laboratorio Sanofi Pasteur, se encuentra en su fase III de desarrollo clínico, o sea, en su etapa final. De esta forma lo aseguró a La Tercera la Doctora Betzana Zambrano, Directora Regional de Desarrollo Clínico para Latinoamérica, quien forma parte del equipo regional involucrado en la estrategia.
La investigación y desarrollo que ha tomado casi 70 años desde los primeros intentos a finales de la Segunda Guerra Mundial -primordialmente por un tema de seguridad- se encuentra en la etapa que antecede al registro sanitario para ser adquirida por las personas, lo cual significa que "está en avance", explicó Zambrano.
El desafío científico que planteaba esta vacuna consistió también en elegir un enfoque contra los cuatro serotipos que existen para el virus del dengue.
"Los modelos previos de la vacuna, con un método clásico de atenuación, presentaban dos inconvenientes: o producían síntomas similares al dengue, por una atenuación insuficiente de alguno de los 4 serotipos, o eran demasiado atenuadas, sin producir síntomas de la enfermedad, pero con producción insuficiente de anticuerpos contra el virus", explicó la especialista.
En las fases I y II del proyecto, el laboratorio contó con la participación de niños, adolescentes y adultos. El objetivo principal fue evaluar la seguridad e inmunogenicidad (capacidad de producir anticuerpos) de la vacuna en poblaciones endémicas (donde la enfermedad y su transmisión existen), así como también en poblaciones no expuestas al virus, pero donde las personas pueden viajar a lugares endémicos de dengue.
Previo a estas etapas iniciales en humanos, la vacuna completó el desarrollo pre-clínico en laboratorio y en animales, "mostrando ser segura para poder ser probada en humanos", según comentó la doctora Zambrano.
"Por primera vez una vacuna contra el dengue ha logrado alcanzar fases avanzadas en el desarrollo clínico", agregó.
LATINOAMÉRICA E ISLA DE PASCUA SE VERÁN FAVORECIDOS
Se trata de un virus que es considerado como un desafío para la salud pública, principalmente en países de Latinoamérica como lo son Brasil, Colombia, Venezuela, México, Paraguay, entre otros, donde ocurren regularmente epidemias de dengue.
En el caso de Chile, el mosquito y la transmisión del virus se ha detectado solo en Isla de Pascua, siendo la zona de riesgo en el país que se vería favorecida con la adquisión de este producto.
La noticia toma sentido, tomando en cuenta que la Isla de encuentra en "alerta preventiva", decretada por el Ministerio de Salud, debido a que la cantidad de basura acumulada en los patios de los pascuenses, han generado sitios ideales para la reproducción del mosquito que transmite el virus. La medida busca impedir un "nuevo brote".
Dado que los perfiles epidemiológicos varían para cada realidad país, la definición de los grupos objetivos a vacunar, corresponderán a decisiones que se adecuen a los distintos escenarios, quedando en manos de las autoridades sanitarias de cada nación. De todas formas, desde Sanofi Pasteur, indicaron que "se prevé su utilización a partir del primer año de edad en adelante".