Los ministros de Hacienda, Rodrigo Valdés y de Trabajo, Alejandra Krauss, entregaron este martes a la Presidenta Michelle Bachelet el reporte con el resultado del trabajo de la mesa técnica, realizada junto a los partidos políticos que tienen representación parlamentaria, con las propuestas para mejorar las pensiones.
Valdés señaló que, si bien, hubo coincidencia en varios puntos, el trabajo de la mesa, que se reunió en 15 ocasiones durante siete meses, terminó sin un acuerdo transversal.
"Existen muchos puntos de convergencia y también visiones diferentes en algunos aspectos, como es natural en una sociedad plural. Queremos reafirmar el valor de la mesa de trabajo aunque no hayamos podido tener un acuerdo transversal en todas las materias", dijo Valdés.
Añadió que "tenemos que ser realistas en que tener un acuerdo transversal es difícil, pero eso no significa que no se pueda hacer más esfuerzo y en eso dependemos ahora de las instrucciones de la Presidenta".
En sentido precisó que la Presidenta, que debe definir si se envía un proyecto de ley al Congreso sobre la materia, "va a analizar el reporte que le hemos entregado y decidirá en un plazo breve los próximos pasos".
El secretario de Estado indicó que sólo una vez que la Presidenta tome una decisión se entregarán los detalles de las propuestas.
Consultado sobre si hace alguna autocrítica por no haber alcanzado un acuerdo, el ministro sostuvo que "puedo decir que por esfuerzo no nos quedamos. Fueron muchas reuniones, juntar muchos antecedentes y quiero valorar que aunque no tenemos un acuerdo transversal en todas las cosas, hay un proceso de convergencia muy importante".
Entre esta convergencia citó la necesidad de subir la tasa de cotización por parte de los empleadores, la sostenibilidad y la necesidad de cuidar los efectos fiscales.
El ministro precisó que "nunca estuvo en la idea de construir un proyecto de ley a partir de la mesa, era tratar de construir un acuerdo lo más global posible".
Entre las materias en las cuales existe una visión común Valdés mencionó que tanto la clase media como las mujeres tienen pensiones insuficientes, que se deben cuidar los incentivos para no dar la señal equivocada de que no es importante cotizar, se deben realizar cambios para que las pensiones mejoren a partir de hoy pero también mañana, que se debe mantener el financiamiento separado del sistema solidario y el contributivo, se deben cautelar los efectos en la economía y que es necesario hacer cambios para mejorar la regulación del sistema privado de pensiones.
Si bien, el ministro no quiso dar a conocer las propuestas, según asistentes a la mesa técnica, el planteamiento del gobierno apuntaría a un alza gradual -en un plazo de cinco a seis años- de 5 puntos en la tasa de cotización, de cargo del empleador, que sería gestionada a través de un administrador estatal.
Para la administración de los recursos en la nueva entidad estatal se plantearía un modelo que minimice riesgos, buscando rentabilidad con riesgo acotado.
De los 5 puntos en que aumentaría la tasa de cotización, inicialmente cerca de 3,5 se destinarían a un fondo colectivo de administración estatal, de los cuales entre 2,5 puntos y 3 puntos irían a cuentas individuales y los restantes 0,5 punto a 1 punto a un fondo intergeneracional. Finalmente, otro punto se destinaría a mejorar las pensiones actuales y 0,5 a mejorar las pensiones de las mujeres.