La situación de Jorge Valdivia en Palmeiras parece estar cerca del quiebre definitivo. Por un lado, ni el volante chileno ni el club quieren mantener el vínculo que los une, pero por el otro, el técnico Ricardo Gareca preferiría contar con él, considerando que tiene contarto vigente, que los resultados no lo han acompañado y que su talento podría serle útil. Pero el chileno se quiere ir: quiere mejorar su sueldo. Y la institución paulista preferiría que el exseleccionado nacional parta: quiere ahorrar. La teleserie, en todo caso, aún parece estar lejos de terminar.
Según el diario Folha, el escenario no es alentador para las pretensiones del DT Gareca. Las posiciones de ambas partes parecen cada vez más lejanas. Y el hecho de que Valdivia se haya incorporado ayer a los entrenamientos no causa ninguna gracia.
Luego de que se cayera el pase al Al Fujairah, el club sigue buscándole un destino al chileno.
Valdivia comparecerá ante los medios este jueves. Pero la postura del mediocampista está clara, así como la del club. Se entrena sólo porque sostuvo una reunión, luego de sus vacaciones en Estados Unidos, con José Carlos Brunoro, director ejecutivo de Palmeiras, y acordaron que por el momento s emantenga en la disciplina del equipo, mientras intentan encontrar un final feliz a la comedia.