La Corte de Apelaciones de Santiago será la instancia que resuelva si el fiscal Patricio Caroca declarará como testigo en el juicio contra Pilar Pérez y su sicario, José Ruz, involucrados en el asesinato del joven economista Diego Schdmit-Hebbel.
Así lo concluyó la Segunda Sala del Tribunal Constitucional (TC) que estableció que no tenía facultades para dirimir la contienda, desechando la presentación del fiscal Xavier Arméndariz para evitar que Caroca declarara en el juicio.
La decisión fue valorada por el presidente de la Asociación Nacional de Magistrados, Leopoldo Llanos. Según dijo a radio Cooperativa, "el TC razonó bien. En la parte fundamental de su decisión señala que es ajeno a las atribuciones del TC resolver la situación relativa a que si es factible legalmente que un tribunal adjunto pueda comparecer como testigo. Esta es una atribución exclusiva de los tribunales de justicia", agregando que el caso "tiene que ver con una interpretación de normas jurídicas, lo que corresponde a un tribunal de justicia ordinario", añadió.
Pese a criticar el requerimiento de Armendáriz, Llanos dijo que "ejerció una facultad que tenía" y el TC "consideró que no correspondía que interviniera en este asunto".
La contienda judicial comenzó cuando el juez Daniel Aravena inhabilitó como investigador del caso al fiscal Patricio Caroca y lo incluyó como testigo de los imputados. Al recurso presentado por el jefe de la fiscalía Oriente se suma el que interpuso Rocío Zamorano Pérez, hija de María del Pilar Pérez.
Cabe reordar que por los crímenes de Francisco Zamorano, su pareja Héctor Arévalo, y de Schmidt-Hebbel (25) el Ministerio Público está solicitando una pena de 83 años de cárcel para la mujer imputada, mientras que para el presunto sicario, el ente persecutor pidió 80 años de presidio.
