La ex intendenta de la Región del Biobío, Jacqueline van Rysselberghe, se refirió a la posibilidad de que intente volver a la política, ya sea mediante una candidatura senatorial o a través de una postulación a la Municipalidad de Concepción, tal como lo indicó hoy La Tercera.

Al respecto, la ex jefa regional dijo que "la verdad es que a mí me gusta muchísimo el trato con la gente, por lo tanto, yo creo que es muy probable que vuelva a la política".

"Y los caminos que yo veo para poder volver a la política, si es que finalmente decido eso, son dos: es la alcaldía o es el Senado", explicó en radio Agricultura.

Por otra parte, luego de las divergencias que se produjeron al interior de la UDI durante la polémica por la entrega de subsidios -donde incluso hubo parlamentarios gremialistas que evaluaron apoyar una acusación constitucional en su contra-, la ex intendenta de la Octava Región dijo que "yo tengo las mejores relaciones con la directiva de la UDI; probablemente hay que gente que puede tener opiniones distintas, pero dentro de la diversidad está la riqueza".

"Sinceramente creo, y así lo he dicho cuando me preguntaron por qué no renuncié en febrero, porque en febrero todo lo que se decía era mentira. Al final se me acusaba de un montón de cosas que los hechos, los tribunales y la Contraloría demostraron que era una mentira tras otra", aseguró.

"Renunciar cuando se hacen declaraciones que son falsas abre una puerta muy peligrosa", dijo.

"Pero, después las cosas se enredaron mucho más, vino la acusación constitucional y ya la situación se hacía insostenible y el daño al gobierno era cada vez mayor. Por lo tanto, no quedaba otra opción", explicó.

En relación a su eventual regreso a la política y a la fórmula que finalmente escogerá, la ex jefa regional y ex alcaldesa de Concepción aclaró que "no es hoy día el minuto de las definiciones; hoy día estoy abocada a mí familia, a recuperar el tiempo perdido".

"Ya vendrá el tiempo de las definiciones políticas, pero eso no significa que tenga las puertas cerradas, por el contrario, tengo todas las puertas abiertas y creo que es necesario tomarme un tiempo para, no sólo mirar con calma lo que sucedió y aprender de los errores que cometí, sino también para poder mirar las cosas desde una perspectiva distinta", sostuvo.

"A mí me gusta mucho el trabajo regional. Probablemente genere alguna plataforma ciudadana para poder seguir cooperando con la reconstrucción de mi región y, posteriormente, desde allí, evalúe qué camino quiero seguir, si decido seguir en la política", afirmó.

Consultada respecto al bajo perfil que ha cultivado en las últimas semanas, dijo que "en general, he tratado de salir de la agenda, quiero que las aguas se aquieten, que vuelva la calma, que se puedan restablecer las confianzas, y para eso es necesario un tiempo de receso, un tiempo de reposo".

Respecto a la polémica en torno al caso Kodama, situación que gatilló la renuncia de Magdalena Matte al Ministerio de Vivienda -provocando una inmediata comparación entre el manejo de este caso con el de la controversia en el Biobío-, Van Rysselberghe dijo que "no vale la pena seguir dando vuelta sobre eso, hay que mirar hacia adelante, hay que seguir avanzando".

"Cuando hay problemas, las culpas siempre son compartidas. Hay que asumirlo de esa manera y hay que tratar de aprender de las lecciones y de los fracasos y de los errores. Y yo estoy en eso", comentó.