Ari Vatanen, ex piloto y ahora alto dirigente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), reclama la suspensión el Gran Premio de Fórmula Uno de Rusia, en Sochi, por el conflicto con Ucrania.

"A menudo se dice que no se debe mezclar Fórmula Uno con política, pero el régimen ruso lleva tiempo mezclando política y deporte de forma llamativa, por lo que tenemos que reaccionar", pidió el finlandés Vatanen en el diario británico "The Telegraph".

El ex campeón del mundo de rallies reclama al jefe de la F1, Bernie Ecclestone, y a la empresa CVC: "Bernie y los propietarios deben cancelar la carrera".

El 12 de octubre está previsto que se celebre el primer Gran Premio en Rusia, en la ciudad-balneario de Sochi, que fue sede en febrero de los Juegos Olímpicos de invierno.

Ucrania acusa a Rusia de apoyar a los rebeldes en el este del país que buscan independizarse de Kiev, y de introducir tropas y armamento en territorio del país vecino. Desde hace meses hay combates entre los separatistas prorrusos y las fuerzas del gobierno ucraniano, que han dejado centenares de víctimas.

Según Vatanen, de 62 años, el presidente de la FIA, Jean Todt, comparte gran parte de sus opiniones. "Pero Todt tiene las manos atadas", aseguró el finlandés, que en 2009 se enfrentó al francés por la presidencia del ente, pero que desde entonces trabajan estrechamente.

Vatanen atacó duramente al presidente ruso, Vladimir Putin, y a su gobierno: "¿Apoyamos a ese régimen que está provocando un derramamiento de sangre o decimos que no está bien? Ir a Rusia sería un mensaje de aceptación".

Vatanen, miembro también del Parlamento Europeo en Bruselas, considera que el conflicto es una "situación sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial".

"Debemos preguntarnos cómo nos recordará la historia y qué hemos hecho o no", afirmó.