El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, rechazó hoy "la desinformación, e incluso las calumnias", sobre posibles intrigas en las altas esferas de la Santa Sede y la existencia del llamado "lobby gay" publicadas en la prensa italiana.
"Hay quien intenta aprovechar el movimiento de sorpresa y desorientación", tras el anuncio de que el Papa Benedicto XVI abandonará su cargo, "para sembrar la confusión y desprestigiar a la Iglesia", declaró Lombardi, en una entrevista a Radio Vaticano.
"Quienes sólo piensan en dinero, sexo y poder, y están acostumbrados a ver las diversas realidades con esos criterios, no son capaces de ver otra cosa, ni siquiera en la Iglesia, porque su mirada no sabe dirigirse hacia arriba o descender con profundidad en las motivaciones espirituales de la existencia", agregó.
Una serie de revelaciones sobre una trama de corrupción, sexo y tráfico de influencias en el Vaticano, lanzadas esta semana por la prensa italiana, ensombrece el cónclave para la elección de un nuevo Papa.
Las denuncias, publicadas por dos importantes medios de comunicación de Italia, el diario La Repubblica y la revista Panorama, aseguran que el Papa decidió abandonar el cargo tras recibir un informe ultrasecreto de 300 páginas, realizado por tres ancianos e intachables cardenales.
En el informe se describen las luchas internas por el poder y el dinero, así como el sistema de "chantajes" internos basados en debilidades sexuales, el llamado "lobby gay" del Vaticano, consigna AFP.
AUDIENCIA
En tanto, el Papa recibió hoy al presidente italiano, Giorgio Napolitano, pocos días antes de su renuncia al pontificado. El Presidente, que también va a dejar su cargo, se despidió en una audiencia privada del Papa, indicaron fuentes del Vaticano, señaló Dpa.
Previamente, Benedicto XVI había pronunciado unas palabras al cierre de los ejercios espirituales de la Cuaresma. Agradeció a la curia y a los cardenales por su trabajo en los últimos ocho años, en los que llevaron el peso del papado a su lado con "gran capacidad, entrega, amor y fidelidad". Con ellos se queda su agradecimiento, su cercanía espiritual y una profunda comunidad en la oración, dijo. También advirtió que "el mal trabaja para ensombrecer, para ensuciar la belleza de Dios", y que creer significa "tocar" su mano y ver su amor".
Para el último rezo del Angelus de Benedicto XVI este domingo se espera la presencia de decenas de miles de fieles en la plaza de San Pedro.
El miércoles será la última aparición pública del Papa, en la audiencia general que celebra siempre ese día. Según Radio Vaticano, el jueves 28, cuando acaba el pontificado, será cerrada la cuenta de Twitter del pontífice, que había llegado a tener más de dos millones de seguidores.