"Nadie quiere dinero, sólo queremos un lugar donde vivir", señalaron los propietarios y arrendatarios del colapsado edificio Alto Río de Concepción, el cual se convirtió en el símbolo de la catástrofe tras el terremoto, y exigieron al Gobierno Regional del Biobío que realicen los trámites para obtener subsidios, a casi nueve meses del sismo.
Marcelo Bravo, vocero de las familias, indicó que "hemos tenido solamente dos reuniones con el Gobierno Regional para ver el tema de los subsidios y se nos pidió que juntáramos los antecedentes de nuestros vecinos y se los lleváramos para saber si habían problemas legales, o de seguros, entre otros".
No obstante, los vecinos solicitaron directamente a la intendenta Jacqueline van Rysselberghe, que estos trámites los haga el Gobierno Regional, debido al tiempo que ha pasado desde el terremoto y a la nula respuesta que han recibido a su demanda habitacional.
"Nosotros sólo llevamos una nómina de los datos de las personas y le pedimos a la autoridad que, debido al tiempo que ha transcurrido, ellos gestionen las llamadas y todo lo que necesiten para otorgarnos los subsidios", explicó.
Asimismo, añadió que lo único que espera la comunidad es tener pronto una solución definitiva, ya que la mayoría está viviendo como allegados. "Toda la gente de los departamentos estamos sin nada, perdimos todo y lo único que queremos es solucionar a la brevedad este tema de la vivienda, porque el 80% está viviendo en esa condición".
Finalmente, dijo que están "confiados", en que esta vez tendrán una respuesta favorable a sus demandas, ya que vieron una "voluntad positiva" de la máxima autoridad regional y que esperan reunirse con la intendenta esta semana.
En tanto, el portavoz de Alto Río expresó que el gobierno destinó recursos para el retiro de los escombros, y los vecinos no tendrán que pagar por limpiar el terreno, siendo esta una de las condiciones que se les había planteado en el pasado.