Al momento de la emergencia, Marcela González estaba con sus dos hijas en su casa, en el sector de Lomas de San Alberto. En cosa de minutos, y producto del fuerte viento en el sector, las llamas llegaron a pasos de la vivienda. Relató que tuvo que evacuar rápidamente el lugar, sólo con bolsos y algunas pocas cosas en su poder. Al volver, vio que lo único que se salvó fue una bodega.

"Esto estaba rodeado de fuego, arranqué con mis hijas y mi marido se quedó para ver si podía rescatar algo, pero la casa ya estaba en llamas. Se quemaron gallinas, cerdos, los galpones con herramientas. Teníamos leña y una bodega con avena, y no quedó nada, quedamos con lo puesto", contó.

La tragedia se vivió de cerca. Uno de los sectores más afectados por el incendio forestal de Parral, en la VII Región, fue aquel de Lomas de San Alberto. Allí, una decena de familias perdió por completo sus viviendas. El siniestro, que también afectó a la localidad de Catillo, obligó a evacuar a cerca de 2.600 personas.

Guillermo Pérez, otro vecino del sector, también perdió su vivienda. Señaló que personal de Fuerzas Especiales de Carabineros llegó para alertarlos y evacuarlos. "El fuego venía cerca, estaba solo con mi señora, y cuando salimos ya estaban los carabineros avisando que nos teníamos que ir. Regresé hoy en la mañana. La casa se quemó entera. Ahora queda empezar todo de nuevo. Al lado había una plantación de pino, hace poco la habían podado. Menos mal, porque habría sido peor, esto era un completo infierno", sostuvo.

En camioneta

Adelia Contreras y Luis Fuentes son un matrimonio de adultos mayores que viven solos en Lomas San Alberto. "Menos mal que mi esposo tiene una camioneta y pudimos arrancar. Es increíble, pero el fuego llegó sólo hasta la entrada de la casa, lo único que se quemó fue la bodega. Debido a todo esto me bajó la presión y los bomberos tuvieron que atenderme. Aún ando nerviosa", relató.

El sector de Catillo, a 26 kilómetros del centro urbano de Parral, también sufrió con el avance de las llamas y tuvo que ser evacuado. Producto del viento, el fuego no pudo ser controlado, por lo que la gente comenzó a dejar sus casas.

"Había mucha gente, ya que Catillo es conocido por sus termas y se estaba celebrando la semana de nuestra localidad. Aún no sé cómo está mi casa. Mi papá y yo pasamos la noche en un albergue", comentó Javier Poblete.

Los afectados por la emergencia fueron trasladados a diferentes lugares habilitados por el municipio de Parral. Se dispuso del Centro de Educación Integrada Adultos Juanita Zúñiga de Parral como albergue, donde anoche había 21 personas.

Difícil acceso

En cuanto a la entrega de ayuda, Sergio Galilea, coordinador para la reconstrucción, señaló que "ya tenemos confirmada la cantidad de casas afectadas; aún nos queda recorrer lugares de más difícil acceso, pero esperamos entregar el viernes (mañana) el bono de enseres para los damnificados".

Pedro Fernández, gobernador de la provincia de Linares, explicó que "en un principio se hablaba de 40 casas siniestradas, porque esto estaba rodeado de fuego. Pensamos que ya no quedaba nada, pero con las llamas más controladas pudimos constatar que son cerca de ocho las casas con pérdida total en San Alberto".

El ministro (S) de Defensa, Marcos Robledo, también se movilizó a la zona afectada para conocer el estado del combate del fuego y la ayuda a los damnificados.