Universidad Católica y Vélez Sarsfield ya chocaron este año, por la Copa Libertadores, con balance positivo para los cruzados. Para el técnico Ricardo Gareca, la UC mantiene el mismo estilo que en el primer semestre, por lo que espera una llave difícil por los octavos de final de la Copa Sudamericana. El objetivo del cuadro argentino para el duelo de ida es cortar el juego de Católica.

Vélez llegó esta tarde a Chile y el entrenador comentó que "he visto a la Católica y me parece un buen equipo, que mantiene las mismas ideas del semestre pasado y Vélez mantiene las mismas ideas de siempre. Yo creo que será una llave difícil. Nosotros estamos acostumbrados a tratar de ganar los partidos y a eso venimos".

El defensa Sebastián Domínguez declaró que "es un partido difícil. Nuestra misión es no dejarlos jugar, no dejarlos crecer con el balón. Sabemos que no están atravesando un buen momento en el torneo local, aunque nosotros tampoco estamos bien, así que somos dos equipos con las mismas necesidades".

Vélez se ubica noveno en el torneo argentino, mientras que la UC suma cuatro derrotas consecutivas.