El presidente venezolano Hugo Chávez no destituirá al ministro de Petróleo y Minería por la explosión que causó la muerte de al menos 42 personas, en el peor desastre en una refinería del país, anunció el mandatario el miércoles.
Expresando amplio respaldo por Rafael Ramírez, Chávez dijo que designaría nuevamente al funcionario para dirigir el estratégico ministerio y la petrolera estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) si gana otro mandato en las elecciones del 7 de octubre.
La causa de la explosión es objeto de una investigación, pero algunos expertos han dicho que la falta de mantenimiento habría elevado las probabilidades de estos desastres en Venezuela, que tiene una de las las reservas petroleras más grandes del mundo.
Chávez expresó respaldo por Ramírez cuando un periodista le preguntó si podría considerar las destitución de su ministro del sector por el asunto.
Chávez dijo que no se podían hacer suposiciones de un despido de alguien como el ministro Rafael Ramírez, si aún no se había completado las investigaciones, dijo en una conferencia de prensa en Caracas.
El presidente indicó que se veía obligado a salir en su defensa porque lo considera un gran venezolano.
La causa de explosion del 25 de agosto, que dejó más de 150 personas, es investigada.
La refinería de Amuay es una de las más grandes del mundo e integra el Centro de Refinería Paraguana de PDVSA, que incluye a la adyacente refinería Cardon.
Chávez sobrevoló el lugar de la explosión después del desastre y ha ofrecido ayudar a las familias cuyas viviendas fueron destruidas.
El candidato de la oposfción Henrique Capriles, que se enfrenta a Chávez en las elecciones del 7 de octubre, ha exigido una minuciosa investigacion.
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