Tras un mes de un juicio oral que se realizó por tercera vez, el 4° Tribunal Oral en lo Penal determinó que el suspendido gerente del Banco Central, Enrique Orellana, es inocente del delito de violación y abuso sexual en contra de sus tres hijas, cuando éstas tenían 3, 4 y 9 años.
El veredicto que absuelve a Orellana de todos los cargos imputados es el definitivo, luego que dos juicios anteriores fueran anulados por la corte de Apelaciones y la Corte Suprema.
Orellana en primera instancia fue absuelto y luego condenado a 60 años de cárcel.
El abogado querellante, Fernando Monsalve, indicó tras el veredicto que "estamos en presencia de un quiebre institucional, está demostrado que la justicia es para quienes tienen poder".
Consultado sobre si se sienten desamparados, el abogado indicó que "más que nosotros, es peligroso el precedente que se establece acá y en la Corte Suprema".
El Fiscal regional de la fiscalía Centro Norte, Andrés Montes, manifestó su preocupación por las víctimas. "Podemos señalar que el Ministerio Público presentó acusación en este caso, con la claridad y la convicción de que los hechos ocurrieron tal como lo señalaron las víctimas, estimamos que la prueba ha sido la rendida en el juicio, y que ésta demostraba los hechos que formaban parte de la acusación. Nos sorprende y nos preocupa particularmente la situación de las víctimas".
Además, pese a que este juicio es inapelable, Montes no descartó interponer acciones legales "vamos a esperar la sentencia para ver los cursos de acción".