Los 32 presos mapuches, a quienes en su mayoría se les ha aplicado la Ley Antiterrorista tras ser vinculados a ataques incendiarios en esa zona, cumplen hoy 38 días en huelga de hambre, en demanda por obtener un juicio común.
Frente a ello, el padre Fernando Díaz, coordinador de la pastoral mapuche de la zona sur, y quien ha trabajado varios años junto a los comuneros indígenas en Temuco, señaló a La Tercera que los huelguistas "se están deteriorando, a pesar de que están ingiriendo bastante líquido".
"Seguimos con un proceso donde se judicializa, se criminaliza la demanda mapuche, se la lleva simplemente como a un acto delictual sin querer afrontar el problema real que es la demanda y la reivindicación justa del pueblo mapuche, reconocida internacionalmente hoy en día por las Naciones Unidas", considera el padre Díaz, quien agregó que "la judicialización de la causa mapuche es una equivocación gravísima que ya cometió el gobierno de la Concertación y este gobierno parece que lo va a hacer con todo".
De acuerdo al padre Díaz, quien trabaja junto al obispo de la Diócesis San José de Temuco, monseñor Manuel Camilo Vial, esta situación es preocupante ya que de parte del gobienro "no hay una comprensión real de lo que es el tema indígena y lo siguen reduciendo a un problema de: 'Vamos a dar subsidios, vamos a dar plata, no vamos a permitir ningún desorden'".
CLASE POLITICA
En cuanto a los esfuerzos de la clase política para solucionar el tema del conflicto mapuche, Fernando Díaz considera que "ni los parlamentarios ni los partidos políticos han tomado en serio al pueblo mapuche, lo utilizan para sus votos, siempre que se sacan una foto colocan a un mapuche, hay una utilización muy sucia para sus campañas, pero después, a la hora de tomar decisiones políticas, económicas, sociales, los olvidan".
Consultado sobre el hecho de que estos presos en huelga de hambre sean eventualmente derivados a la Fiscalía Militar, el coordinador de la Pastoral Mapuche cree que "eso sigue siendo una aberración. Ya la Corte Interamericana de Derechos Humanos se ha quejado, lo ha planteado".
Según Díaz, "el pueblo mapuche no es lo mismo que hace 20 años ni hace 30 años, hoy día hay mucha mayor conciencia de cuales son sus derechos", pero que el conflicto seguirá empeorando, ya que "los intereses sobre las tierras de la Araucanía se mantienen en la línea histórica de explotación de una política que no considera ni siquiera al medio ambiente, menos los derechos de pueblos indígenas".