Anoche tenía previsto llegar a Santiago el vicecanciller boliviano, Juan Carlos Alurralde, para participar al mediodía de hoy en la ceremonia de conmemoración del día nacional de Bolivia en la residencia de la cónsul general de La Paz en Chile, Magdalena Cajías.

El hecho, que no tiene precedentes en las últimas décadas, es considerado una señal de distensión de parte del gobierno del Presidente Evo Morales para descongelar la relación bilateral en medio del juicio de La Haya y la impugnación de la competencia de la Corte Internacional de Justicia planteada por Chile.

Por lo mismo, Alurralde será recibido en el edificio Carrera por el canciller Heraldo Muñoz, ratificando así el interés de la actual administración por bajar la tensión entre Santiago y La Paz y retomar el diálogo sobre los temas de la agenda bilateral, con excepción de la aspiración marítima boliviana que está radicado en La Haya, luego que el gobierno de Evo Morales entablara la demanda.

Según fuentes diplomáticas chilenas y bolivianas, el viaje de Alurralde fue informado el viernes pasado por la cónsul Cajías al canciller Muñoz, durante una extensa reunión que ambos sostuvieron en el piso 15 del edificio Carrera. Esta era la primera vez que la embajadora boliviana era recibida oficialmente por el canciller desde que asumió el cargo en abril pasado. A fines de junio, Cajías había tenido que concurrir a la sede de la diplomacia chilena para recibir una nota de protesta del gobierno de Bachelet por la entrega a las delegaciones que asistieron a la cumbre del G77 en la ciudad de Santa Cruz de un reloj con el mapa boliviano que incluía territorio chileno. En esa oportunidad, sin embargo, la diplomática se entrevistó sólo con el director general de política exterior, Alfredo Labbé.

"MENSAJE DE PAZ"

Para el ex canciller boliviano Armando Loayza, el viaje de Alurralde es "una buena noticia" para Chile y Bolivia.

"El gobierno de Evo Morales quiere hacer un gesto para bajar el tono y disipar el clima tan enrarecido. Se han llevado muy lejos las cosas y se han exacerbado las declaraciones en los últimos meses", recalcó Loayza.

En la cancillería chilena esperan que Alurralde reitere el mensaje de paz que buscó transmitir el 29  abril pasado, cuando vino de manera inesperada a Santiago para presentar formalmente a la recién llegada cónsul Magdalena Cajías.

"Son tiempos de esperanza entre nuestros pueblos, en que tenemos que saber reconocer que hay problemas pendientes, pero que tenemos toda la voluntad de superar", dijo entonces Alurralde.

Fuentes de la Cancillería chilena aseguran que tras escuchar las declaraciones del viceministro boliviano, el canciller Muñoz hizo gestiones para reunirse con Alurralde. Sin embargo, no pudieron concretarse, porque para el momento en que lograron comunicarse, el personero boliviano ya estaba a punto de abordar el avión de regreso a La Paz.

En el marco de la agenda por el día nacional de Bolivia, y también como un gesto de distensión, Alfredo Labbé tiene contemplado acompañar a la cónsul Magdalena Cajías en algunas actividades (ver dato). En tanto, anoche la cancillería analizaba a quién designar para ir, en representación del gobierno, a la recepción oficial en la residencia de la diplomática.b