En medio de la ofensiva de la Concertación por el caso de la Intendenta del Biobío, Jacqueline van Rysselberghe, por el cual el conglomerado opositor evalúa presentar una acusación constitucional en su contra, el PRI manifestó hoy que su apoyo a la medida será analizado luego de conversar el tema con los parlamentarios opositores y oficialistas.
La vicepresidenta del PRI, Alejandra Bravo, dijo hoy a La Tercera que "hay un aprovechamiento político" en el tema.
"Han habido problemas más graves, y la Democracia Cristiana y la Concertación no actuaron con la misma rigurosidad", comentó, dando como ejemplo el caso de la ex ministra de Educación, Yasna Provoste.
En ese sentido, dijo que los miembros del partido "van a tener la posibilidad de actuar con autonomía".
Esto, luego de conocerse que a mediados de la próxima semana el presidente del PRI, Pedro Araya, se reunirá con diputados de la DC para tratar el tema.
"Creemos que es muy temprano pedir un pronunciamiento respecto a la situación de la intendenta", aseguró Bravo.
A su juicio, se debe esperar cómo va a actuar la propia Van Rysselberghe y qué sucederá con el informe jurídico encargado por el Ministerio del Interior. "Consideramos irresponsable pronunciarnos a priori", dijo.
Por su parte, el diputado Pedro Araya dijo que "no vamos a anticipar ningún juicio mientras no conozcamos la totalidad de los antecedentes".
El parlamentario aclaró que "vamos a ver las pruebas que se acompañan y no descarto que en esta línea podamos también tener reuniones bilaterales tanto con la Concertación como con la Alianza, para ver los puntos de vista respectivos que hay para la acusación constitucional".