El número de muertes causadas por influenza humana en Brasil se acerca al centenar después de que varios estados registraran hoy 16 fallecimientos más, dos de ellos en la región nordeste, una de las menos afectadas por el virus AH1N1.
Con los nuevos fallecimientos el número de muertes confirmadas en Brasil por las secretarías regionales de Salud subió a 92, cifra que no ha sido confirmada todavía por el Ministerio de Salud, que presenta sus balances de la enfermedad una vez por semana.
Los estados de Bahía y Pernambuco, en el nordeste, y el sureño de Santa Catarina confirmaron las primeras muertes en sus territorios, mientras que Río de Janeiro (sureste) y Río Grande do Sul, fronterizo con Argentina y Uruguay, reportaron nuevas víctimas fatales.
En Pernambuco, una joven de 17 años murió en la ciudad de Olinda, mientras que en Bahía se registró la muerte de un hombre, y tres personas más fallecieron en las ciudades de Concordia y Tubarao, ambas en Santa Catarina.
"Eso refuerza la necesidad de que la población se adhiera a las recomendaciones formales para la prevención de la gripe A y de que tome conciencia de las medidas de higiene que pueden contener la transmisión del virus", señaló el secretario de Salud de Santa Catarina, Dado Cherem, al confirmar las tres primeras muertes en esa región.
En Río de Janeiro la secretaría de Salud informó hoy de siete nuevas víctimas fatales, entre ellas tres mujeres embarazadas y tres niños.
Las otras cuatro muertes ocurrieron en Río Grande do Sul, que con 29 fallecimientos confirmados es el estado más afectado por la enfermedad.
Las autoridades brasileñas investigan además si una joven de 15 años que murió ayer en un avión de Copa Airlines que volaba entre Orlando (EEUU) y Sao Paulo, con escala en Panamá, también fue víctima de la gripe, pues en Estados Unidos había presentado los síntomas asociados a la enfermedad y se le había diagnosticado una neumonía.