El Bayern Múnich volvió a festejar, con un ápice de su poderío. En el regreso de Arturo Vidal a las canchas, presente en los 9 minutos finales, los bávaros vencieron con dificultad 2-1 al Bayer Leverkusen de Charles Aránguiz, quien fue titular y jugó todo el duelo en el Allianz Arena.
Así, los pupilos de Carlo Ancelotti se recuperan después de tres partidos sin ganar: el empate ante el Hoffenheim de Eduardo Vargas (1-1), la derrota ante el Dortmund (1-0) y la caída en Rusia ante el Rostov (3-1), en la semana, por Liga de Campeones.
Sonríe el Bayern, pero en una faceta más frágil. Si bien comenzaron en ventaja con el tanto oportuno (y afortunado) de Thiago Alcántara (30'), a los minutos fueron alcanzados por un Leverkusen bien ordenado y ágil en la presión. Calhanouglu marcó la igualdad parcial después de una excelente pared con la joya alemana, Julian Brandt (35').
Con el equilibrio transitorio se fueron al descanso. En el complemento, el Bayern despertó y desplegó su mejor rostro. Después de 10 minutos de asedio, finalmente la zaga del cuadro de las Aspirinas cedió y permitió el tanto de cabeza Mats Hummels, tras la ejecución de un tiro de esquina (56').
El Príncipe y sus compañeros no claudicaron en su lucha por revertir el resultado. Por momentos encerraron en su terreno al todopoderoso cuadro alemán. Pero no bastó para vencer. No supieron aprovechar a tiempo los desajustes defensivos. Incluso el Rey tuvo para aumentar a minutos de su ingreso.
El Bayern, sin muchas certezas, consigue el triunfo en casa y acorta a tres puntos la distancia con el sorprendente líder de la Bundesliga, el Liepzig (30 puntos). Aunque falta todavía para renacer en plenitud.