La policía francesa tuvo que rociar gas lacrimógeno para dispersar el miércoles a hinchas de Inglaterra en la Eurocopa, la cuarta vez que fanáticos de Inglaterra se vieron involucrados en incidentes de violencia desde el arranque del torneo. Los ingleses y los rusos han sido el gran problema de seguridad de este torneo.
Luego que el partido entre Rusia y Eslovaquia culminó en Lille, la policía dispersó a una muchedumbre de ingleses en calles adyacentes a la principal estación de trenes en la ciudad norteña.
Paulatinamente, un grupo de aproximadamente 200 aficionados ingleses empezó a comportarse de manera agresiva, entonando canciones provocadoras sobre Rusia. Fue cuando se pudo escuchar un fuerte estruendo y se arrojaron botellas.
Inglaterra juega el jueves contra Gales en la vecina ciudad de Lens, y miles de sus seguidores se han congregado en Lille.
La policía habría detenido a un individuo, a quien sometieron en el piso. Acto seguido, la policía cargó hacia los fanáticos, rociándoles con aire lacrimógeno mientras huía corriendo.