Conforme avanzan los días crece la expectación por la visita que realizará el Papa Francisco a Chile, entre el 15 y 18 de enero próximo. Sin embargo, además de la efervescencia por el evento, también existe preocupación por las posibles emergencias por desastres naturales que se podrían presentar durante su estadía en el país.

Lo anterior, porque la visita del líder de la Iglesia Católica se dará en plena temporada estival, pero también en una época en que los incendios forestales comienzan a aflorar. A este riesgo se suma la posibilidad de fenómenos como marejadas, tsunamis, temblores y terremotos, que no pueden ser previstos con exactitud.

Por este motivo, la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) y la Corporación Nacional Forestal (Conaf) dispondrán en las regiones Metropolitana, Tarapacá y La Araucanía sistemas de operaciones y coordinación de los organismos de emergencia, dependiendo del tipo de amenazas existentes en cada zona. El trabajo también se coordinará con Carabineros, PDI, Bomberos, Ministerio de Salud, Defensa Civil y empresas del sector, entre otros actores.

Para la prevención de incendios forestales, Conaf ha dispuesto dos planes. Uno para la Región Metropolitana y otro para La Araucanía. Pablo Lobos, gerente de protección contra incendios forestales de la entidad, explicó que "se realizarán patrullajes preventivos en zonas de interfaz, rutas de alto tránsito y puntos de encuentro. En el caso específico de la RM, se entregarán mensajes de prevención en zonas claves como el peaje de Melipilla y Angostura de Paine".

El trabajo preventivo ya partió hace meses. Desde octubre se han realizado cortafuegos en las zonas donde históricamente se producen incendios. Además, en el caso de Santiago, también se realizarán vuelos de detección de focos de incendio desde el aeródromo Tobalaba.

Como primera respuesta de combate, la corporación desplegará sus sistemas de protección en toda la región, pero "focalizado en puntos específicos, como infraestructura crítica, zonas de parques y reservas nacionales y rutas internacionales", precisó Lobos.

En cuanto a despliegue técnico, en la RM habrá 18 brigadas y cinco aeronaves, mientras que en La Araucanía se posicionarán 23 grupos y seis vehículos aéreos.

En caso de que la situación sea más grave se producirá el "desplazamiento de brigadas de refuerzo desde puntos cercanos, como Valparaíso, O'Higgins, Maule, Biobío y Los Ríos", precisó. Para estos efectos hay en total 110 brigadas y 28 aeronaves disponibles.

Onemi

La primera determinación que tomó la Onemi para resguardar la seguridad en la visita será declarar alerta temprana preventiva en las tres regiones. Además, solicitaron la generación de planes de emergencia por parte de las empresas proveedoras de servicios básicos, como agua potable, electricidad, telefonía y combustible.

Álvaro Hormázabal, director de Onemi Tarapacá, explicó que su plan de acción se hizo de acuerdo a un informe de análisis y riesgos que le permitió definir el sector donde realizar la liturgia en el sector de playa Lobito. "Esta zona tiene una cota superior a 30 metros -línea de seguridad establecida para tsunamis- y que se emplazará en un área libre de peligro de aluvión. De esta manera, si existiera alguna posibilidad de tsunami o terremoto, la gente no estará en peligro", sostuvo.

En el caso de playa Brava (zona con riesgo de tsunami), la ubicación de los feligreses será en sentido contrario y no se permitirá la ubicación de personas en el sector de la playa misma. De esta forma, en caso de emergencia, los asistentes podrán evacuar sin impedimento de las vallas papales.

En la Región Metropolitana, el director de Onemi, Rodrigo Rojas, explicó que hay una mesa técnica trabajando en definir las zonas de seguridad y el despliegue de personal que se realizará en caso de emergencias.

Añadió que "ya existen planes de contingencia en caso de otras amenazas que puedan afectar servicios básicos, como agua potable o electricidad".

En tanto, Janet Medrano, su par en La Araucanía, detalló que en la IX Región a las amenazas ya nombradas se suman los accidentes vehiculares en la carretera por el gran desplazamiento de personas que se producirá. Por lo tanto, se reforzarán las comunicaciones con los interservicios el día de la misa en la Base Maquehue. Agregó que "también se mantendrá constituido un puesto de mando intersectorial, de manera de coordinar en el más breve plazo cualquier situación que pudiera ocurrir y que amerite actuación de ambulancias, Bomberos, Carabineros u otros servicios", señaló Medrano.

Respecto de las zonas de seguridad predeterminadas, la autoridad regional sostuvo que "debido a la extensión del terreno facilitado por la Fach para la misa, existen amplias zonas interiores que podrán ser utilizadas como zona de seguridad en caso de, por cualquier motivo, requerirse evacuar las "parcelas" donde permanecerán los feligreses".