En Estados Unidos, los médicos hablan de una epidemia silenciosa y no se trata de un virus como el AH1N1: dos tercios de su población adulta presenta déficit en sus concentraciones de vitamina D. "Tiene proporciones epidémicas", dice a La Tercera Brent Muhlestein cardiólogo del Intermountain Medical Center de EEUU, quien acaba de publicar un estudio que indica que los bajos niveles de esta vitamina aumentan al doble el riesgo de sufrir un ataque cardíaco, en mayores de 50 años.

El dato resulta preocupante, pues los bajos niveles de este nutriente han sido también relacionados, por numerosas investigaciones, con un mayor riesgo de sufrir osteoporosis, diabetes e infartos cerebrales.  De allí que su carencia se ha transformado en una  preocupación creciente entre los médicos norteamericanos, a tal punto que están recomendando a sus pacientes realizarse exámenes para medir la cantidad de esta sustancia en la sangre y definir la necesidad de un tratamiento con suplementos de vitamina D.

En Chile, la situación no es mejor. Un estudio de la Universidad Católica mostró que uno de cada tres chilenos sufre deficiencia de vitamina D, situación que alcanza al 80% en los adultos mayores y a un 100% de la población que vive en la zona sur del país. "El déficit de vitamina D es una de las carencias vitamínicas más comunes en Chile", explica Paola Negrón, nutrióloga del Centro de Obesidad UC.

LAS CAUSAS DE DÉFICIT
Dos son los principales factores que explican los bajos niveles de vitamina D. Por un lado, la ausencia en la dieta de alimentos ricos en este nutriente, como los lácteos, el huevo y los pescados y los interiores de animales. Por otra parte, la menor exposición al sol impide la generación natural de esta vitamina que se produce cuando la piel recibe directamente los rayos solares.

Según el endocrinólogo de la Universidad Católica, Gilberto González, la dieta de los chilenos aporta sólo 120 unidades de vitamina D, en circunstancias que la ingesta diaria recomendada es de 800 a mil unidades de este nutriente.

Para Paola Negrón, las campañas de prevención del cáncer a la piel también han contribuido con su cuota: "El mensaje para la gente es que es dañino exponerse al sol, sin embargo, eso también implica que las personas dejan de generar la vitamina D en forma natural".

¿Qué hacer? En Chile, al igual que en EEUU, está disponible el test que mide los niveles de vitamina D en la sangre, en algunas clínicas privadas.
Francisco Pérez, académico de la Facultad de Medicina de la U. de Chile, recomienda realizarse este examen y en caso de constatar un déficit de vitamina D, "darle un enfoque nutricional, tratando de suplir la carencia con alimentos ricos en esta sustancia. Si esto no resulta, entonces puede acudir a suplementos en cápsulas".

Gilberto González indica que "la recomendación para las personas mayores de 50 años es consumir cápsulas de vitamina D diariamente, pues es la única forma en que pueden alcanzar los niveles recomendados de esta sustancia".

Por su parte, la nutrióloga Paola Negrón aconseja el consumo constante de alimentos a los que se ha agregado vitamina D, como leches y jugos actualmente disponibles en el mercado, además de suplementos de calcio que, además, contengan vitamina D, en el caso de las mujeres que han alcanzado la menopausia.

Sobre la exposición solar, la especialista indica que "hay que buscar un equilibrio, privilegiando la exposición al sol en horarios con menor radiación solar, para mantener niveles adecuados de esta vitamina".

ALGUNAS RECOMENDACIONES

20 minutos de sol al día
El contacto de la piel con el sol es fundamental para que el cuerpo humano genere de manera natural la vitamina D. La nutrióloga Paola Negrón recomienda preferir la exposición en horas de menor radiación ultravioleta.

Cambios en la alimentación
Los expertos recomiendan un mayor consumo de pescados, huevos, lácteos y aceites animales, ricos en vitamina D. Eso sí, el endocrinólogo Gilberto González advierte que el aporte de la dieta nunca superará el 15% del requerimiento diario.

Cápsulas de vitamina D
Según Carlos González, la recomendación para la población general sobre los 50 años es consumir suplementos alimenticios. Según explica, las dosis recomendadas son seguras y no provocarían intoxicación por exceso de este nutriente.

Los principales grupos de riesgo
Los niños pequeños y los adultos mayores son los grupos con mayor riesgo de déficit de vitamina D, debido a las restricciones en su alimentación y la escasa exposición al sol. En estos casos, los médicos recomiendan los suplementos vitamínicos.