En un intento de no quedar sepultado por la retahíla de cambios que se anunciarán este fin de semana desde Singapur, Mercedes se adelantó a la vorágine y confirmó la continuidad de Valtteri Bottas con vistas al curso que viene. Se trata de la ratificación de lo que era un secreto a voces, confirmado incluso por la mayoría de los integrantes de la cúpula de la escudería alemana. En su primer curso como titular de una de las Flechas de Plata, el finlandés, de 28 años, parece haberse adaptado perfectamente a su nueva estructura, y hasta el momento ha cumplido con creces: acumula dos victorias y nueve podios y figura el tercero en la tabla de puntos, a 38 puntos de Sebastian Vettel, el segundo, y a 41 de Lewis Hamilton el líder del Mundial y su compañero de equipo.

Bottas fue llamado a última hora tras el portazo de Nico Rosberg días después de haberse proclamado campeón; un reto de altura para el corredor de Nastola, que tras un arranque medio dubitativo se ha afianzado en su papel de perfecto escudero de Hamilton, la principal apuesta de la marca de Stuttgart en la pelea por el título. "A Valtteri le planteamos un gran reto al incorporarle a última hora para que pelee en la parte alta y como compañero del mejor piloto de la parrilla", conviene Toto Wolff, máximo responsable de Mercedes. "Si tenemos en cuenta todo lo que eso supone, diría que sus resultados han sido incluso mejores de lo esperado", le piropea el ejecutivo austríaco. "Ha tenido altibajos, pero más altos que bajos. No tenía sentido que no continuáramos con él", zanja Wolff. "He podido aprender y crecer mucho como piloto y pasar por momentos [las victorias] que nunca olvidaré. El equipo hizo un acto de fe al ficharme, y este nuevo contrato de pone de manifiesto que me he ganado su confianza", añade Bottas.

Todos pendientes de Sainz y McLaren

La renovación de Bottas es el primer punto relevante informativamente hablando de un Gran Premio de Singapur que llega cargado. La ruptura entre McLaren y Honda irá de la mano de la de Toro Rosso y Renault, que con toda seguridad llevará a Carlos Sainz a cambiar de aires: el español será piloto del constructor francés ya en 2018 y hasta puede que antes. Llegados a este punto, no tendría ningún sentido que Fernando Alonso no terminara firmando la prolongación de su acuerdo con su actual equipo, a la espera de comprobar, dentro de unos meses, si la nueva alianza entre McLaren y Renault, inédita hasta este momento, le permite eso que tanto busca: "volver a pelear por ganar carreras".