La tensión entre Ecuador y Estados Unidos creció luego que Washington decidiera expulsar al embajador ecuatoriano, Luis Gallegos, en represalia por la salida de la delegada diplomática estadounidense en Ecuador esta semana, Heather Hodges, dijo a Reuters un funcionario del país norteamericano que pidió no ser identificado.
El funcionario indicó que Washington había cancelado negociaciones bilaterales previstas para junio. Y si bien se quería mantener una relación positiva, la expulsión de la embajadora Hodges debía ser "tomada en cuenta".
El gobierno de Rafael Correa declaró el martes como persona non grata a Hodges, a raíz de unos comentarios realizados sobre una supuesta corrupción policial y que fueron filtrados por el sitio Wikileaks.
Los documentos recogidos por el diario español El País y que tendrían la firma de Hodges, revelaban prácticas de corrupción por parte de oficiales de alto rango de la policía y sostenían que un funcionario de la Embajada estaba seguro de que Correa también sabía sobre los ilícitos.
"La acción injustificada del gobierno de Ecuador de declarar a la embajadora Hodges persona non grata no nos deja otra opción que una acción recíproca", indicó un funcionario estadounidense.
Paralelamente las actividades del subsecretario de Defensa de Estados Unidos, Frank Mora, en Ecuador, fueron suspendidas, según anunció la vocera de la embajada norteamericana en Quito, Martha Youth.