El primer ministro chino, Wen Jiabao, aseguró hoy que la economía china se estabilizará tras la puesta en marcha de las medidas de estímulo adoptadas este año y consideró que se encuentra en vías de cumplir los objetivos de crecimiento para este año.
En su discurso de inauguración del llamado "Davos Asiático" -la edición de verano del Foro Económico Mundial- en la ciudad de Tianjin (noreste de China), Wen aseguró que la economía se mantendrá en una vía de crecimiento relativamente rápido pero estable.
La estabilidad, indicó, será la gran prioridad de su Gobierno, que ha tomado una serie de medidas para ello a lo largo de los últimos meses, como el recorte de los tipos de interés en dos ocasiones desde junio o nuevas inversiones en infraestructuras.
La semana pasada las autoridades chinas dieron a conocer que el país desembolsará 800.000 millones de yuanes (127.000 millones de dólares) en proyectos de infraestructura, incluidas nuevas líneas de metro y de tren, para tratar de estimular la economía.
"A medida que esas medidas vayan teniendo efecto, podemos esperar que la economía se vaya estabilizando", declaró el primer ministro chino.
El jefe del Gobierno de la segunda economía del mundo prometió también nuevas medidas para estimular "el enorme potencial de la demanda interna", como recortes de impuestos o políticas para alentar las inversiones del sector privado, aunque no ofreció detalles concretos.
Wen advirtió, no obstante, contra los desequilibrios globales que pueden poner en peligro la recuperación.
Así, indicó, los mercados globales padecen fuertes fluctuaciones y la crisis de la deuda en Europa no termina de resolverse, por lo que "no hay que subestimar los riesgos" que empujan a un retroceso.
A su juicio, las principales economías mundiales y las instituciones financieras multilaterales "deben aunarse" y fortalecer su coordinación macroeconómica, de manera que colaboren en la recuperación de la economía mundial.
De esta manera, aseguró, "tengo completa confianza en el brillante futuro de la economía china y de la economía mundial", declaró el jefe del Gobierno de la segunda potencia económica global.
El discurso de Wen se produce después de que los últimos datos económicos hayan emitido un panorama decepcionante para la economía china.
Así, las exportaciones crecieron por debajo de lo esperado en agosto, un 2,7 por ciento respecto al año anterior y alcanzaron los 177.970 millones de dólares estadounidenses, un ligero incremento en contraste con la subida del 11,3 por ciento registrada el pasado junio.
Al mismo tiempo, la producción industrial registró su crecimiento más bajo desde mayo, un 8,9 por ciento.
Ello ha hecho temer que el país no pueda cumplir los objetivos de crecimiento para este año, de un 7,5 por ciento, medio punto porcentual menos que el año anterior.
El fin de semana, el presidente chino, Hu Jintao, advirtió en su discurso en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC) clausurada el domingo en Vladivostok (Rusia) que "el crecimiento económico encara una notable presión negativa".
En China, "algunas empresas pequeñas y medianas lo están pasando mal y los exportadores encaran más dificultades", por lo que "tenemos una ardua tarea a la hora de crear empleos para quienes ingresan en el mercado laboral", aseguró entonces Hu.
El discurso de hoy de Wen llega cuando las autoridades chinas se preparan para comenzar el mes próximo, con la celebración del XVIII Congreso del Partido Comunista de China, un proceso de transición de varios meses en el que se renovará por completo la cúpula del poder en el país.