Fue uno de los momentos más recordados en el último choque entre Chelsea y Arsenal. Luego de una infracción recibida por Alexis Sánchez, Arsene Wenger reaccionó molestó con José Mourinho, técnico de los azules, y le propinó un empujón.
Una semana después, el adiestrador francés pidió perdón por su sorpresiva reacción: "Pido perdón, porque siempre he sido contrario a cualquier atisbo de violencia, pero es algo que puede pasar debido a los nervios", señaló el DT al sitio Telefoot.
Eso sí, Wenger reconoció que el portugués tuvo gran parte de la responsabilidad en el hecho: "No debí haber actuado así, pero se debió a las provocaciones de Mourinho".