Pasadas las 9 de la mañana comenzó la reconstitución de escena de la golpiza en contra de Wladimir Sepúlveda, quien permanece grave y con riesgo vital tras ser agredido por un grupo de jóvenes el pasado 6 de octubre.
La diligencia se desarrolla en el centro de San Francisco de Mostazal, en Rancagua, donde la madrugada de ese domingo, Sepúlveda fue golpeado.
La idea es esclarecer los confusos hechos en los que se enmarcó esta riña, cuyas versiones entregadas por diversos testigos difieren entre ellas, pues según el único imputado en la causa, Cristopher Morales, esto se trató de una simple pelea de la cual el imputado se defendió, y la parte querellante encabezada por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), asegura que se trató de un ataque homofóbico.
El fiscal adjunto de Graneros, Jorge Mena encabeza la diligencia, que es presenciada por el presidente del Movilh, Rolando Jiménez, bajo estrictas medidas de seguridad dispuestas por personal de Gendarmería.
Producto de la agresión, Wladimir Sepúlveda permanece internado en el hospital de Rancagua, con un Traumatismo Encéfalo Craneáno con hemorragia subdural que lo mantiene en coma con riesgo vital, tras ser intervenido de urgencia.