Pese a las dudas que se presentaron en un momento, sobre la posibilidad de que no hubiese suficientes censistas y supervisores capacitados para efectuar el censo, éstas se disiparon con los últimos datos entregados por la directora del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Ximena Clark, a cargo de organizar el muestreo demográfico más grande del país. Según el recuento al 13 de abril, no sólo se consiguió que se inscribiera un total de 583.585 voluntarios (44.893 más de los requeridos inicialmente). También se capacitó a 522.867, equivalente a un 97,1% de la meta requerida: 538.692 inscritos y debidamente entrenados. El delta nacional, que es un promedio, se completaría con más capacitaciones programadas entre el viernes 14 y este martes, ya que el censo es este miércoles 19. Sin embargo, al analizar región por región, todas tienen más del 100% de censistas inscritos y seis de ellas superaron el 100% de los capacitados.
¿Qué pasa si no se logra capacitar a las personas que faltan?
Lo que falta es un porcentaje muy menor, que no da cuenta de las capacitaciones que se hicieron este mismo fin de semana y las que se harán el lunes y martes. La información es la vigente al 13 de abril. El llamado, de todas maneras, es que las personas que faltan agenden su capacitación e incluso la refuercen en el mismo sitio web.
¿Y si por algún motivo se presentaran menos censistas?
El llamado siempre ha sido a que esto es un compromiso y que la persona que hizo el esfuerzo de inscribirse y capacitarse, efectivamente llegue el día 19. Pero, hasta ahora, hemos visto mucho compromiso en las capacitaciones y tenemos confianza en que las personas van a llegar.
¿Las coberturas alcanzadas en el número de censistas le permiten respirar más tranquila?
Estos procesos siempre tienen algo de incertidumbre, eso es evidente, pero desde el inicio vimos que la gente ha entendido que es algo muy positivo para el país. Ya hemos capacitado a un 97,1% de los censistas, pero no podemos relajarnos. El trabajo siempre ha sido intenso y el llamado es a que los voluntarios se presenten, operativos, a las 8 horas en los locales. En las capacitaciones siempre les recomiendo poner varios despertadores y llegar con su carné de identidad. Sin él no podrán salir. Eso está muy claro.
Si soy censista y no me presento ese día, ¿tendré alguna sanción?
Si alguien se enferma o no puede, evidentemente, no. Pero es un compromiso. Estamos en la última parte del proceso y debemos terminarlo de buena manera.
¿Podrían llegar más encuestadores de los que se requieren?
Tenemos siete mil locales dispuestos. Podría darse, pero tenemos asignaciones de trabajo para darles a todas las personas que lleguen. Por lo mismo, el llamado es a que todos los inscritos y capacitados lleguen a sus locales.
¿Cómo se censará a los pasajeros que vayan viajando este 19?
Para ser censado arriba de un bus se debe cumplir con el requisito de haber viajado en él al menos cuatro horas, entre la medianoche y las seis de la mañana del día 19. En ese caso, el personal del bus que ya ha sido capacitado entregará un cuestionario especial a cada pasajero, para que lo llene. Lo mismo en los aeropuertos. En la zona de embarque, el personal de la terminal entregará los cuestionarios para que cada persona los complete. Es como un autocenso.
A la gente le preocupan las multas por no responder al cuestionario.
El tema de las multas lo sacó la prensa, pero nosotros nunca hemos hablado de ellas. Las multas son una atribución que tiene el INE en su legislación, porque de alguna manera entregar la información es un deber cívico de todos. Es una atribución, pero hoy nuestro foco es llamar a la participación ciudadana, ya sea abriendo la puerta o como censista.
¿Cómo se puede verificar que el censista efectivamente lo es?
Existen cuatro formas de confirmar la credencial que el censista mostrará. Ingresar el número de carné y chequearlo en la web censo2017, en la web del INE, en una aplicación que pronto se dará a conocer, o vía telefónica al 800 7777-7777.
¿Qué diferencia tiene este proceso con el efectuado en 2002?
Este es mucho más inclusivo en términos de convocatoria, y con elementos tecnológicos que no existían en 2002. Además, el rol del supervisor está mucho más protocolizado. Harán una visita de reconocimiento previo y serán una real ayuda para los censistas, tanto en términos técnicos como prácticos.