Partió sólo como miembro del jurado de la competencia del Festival. A poco andar, se convirtió en el número de cierre de la primera noche, con un show más extenso de lo que se estila para los jueces del certamen. Y luego agregó su labor como conductora del programa satélite Fiebre de Viña,  que cerró por un bono adicional a los US$ 250 mil que le pagaron por su show. Pero Yuri (47) no se conforma con la multiplicación de sus funciones en su regreso al evento tras 16 años de ausencia, sino que todavía tiene planes para capitalizar su paso por el evento.

Y uno de ellos ya rindió frutos: Chilevisión le hizo una oferta para que se haga cargo de un nuevo programa, de corte similar a Fiebre de Viña, y que saldría al aire en el segundo semestre de este año. "Me lo ofrecieron y estoy feliz. Voy a ver si me calzan los tiempos, que son importantísimos", cuenta la cantante caminando por los pasillos del hotel Sheraton Miramar.

La artista agrega que fue Juan Pablo González, director de Fiebre de Viña y de la transmisión televisiva del Festival, quien le realizó la oferta y apunta que una vez que regrese a México, revisará su agenda, para ver si los tiempos calzan. Allá también tiene planes: dos conciertos en el Auditorio Nacional de México; una oferta para animar un nuevo programa allá; y la posibilidad de actuar por primera vez en una comedia musical. "Sería cheverísimo regresar a Chile en esta faceta que la gente no conocía. Ni me considero la mejor conductora de México ni vengo a enseñarles a las conductoras chilenas. Vengo a aprender y a divertirme", remata sobre la posibilidad de volver a animar.

Pero paralelamente, Yuri tiene planes de usar la exposición que le dará su presentación en Viña para relanzar su carrera en la región. En los últimos años, la cantante sólo ha estado enfocada en su país, pero tras los buenos resultados que obtuvo con la gira que realizó en Chile el año pasado, que incluyó un show en el teatro Caupolicán, ahora está retomando la actividad en otros países. "México es un mercado gigante y, sólo ahí, ella tiene mucho trabajo, así que durante harto tiempo dejó un poco de lado los otros países de Sudamérica. Chile fue el primero (país extranjero en lograr fama) y ahora ella está rearmando aquí su cuento internacional", explica Alfredo Alonso, amigo de la intérprete de Maldita primavera y director de la productora que gestionó su visita. Así, por ejemplo, el director del Cono Sur del sello Warner vino a Chile para cerrar los planes para editar su último disco, Inusual (2010), en Argentina. Y por estos días negocian que la cantante realice presentaciones en Perú. Para fines de año, además, se está planificando una nueva presentación en Santiago, en un escenario de mayor envergadura que el Caupolicán, y una gira por regiones.

"El Festival tiene mucha repercusión. Pienso que esto va a traer frutos buenos. Vine hace tantos años... y la gente cree que los ochenteros todavía estamos con el bastón. Y cuando me vuelvan a ver van a decir 'guau, Yuri va a la vanguardia' que es lo mismo que pasó en la gira de Chile".