A la 1:40 de la madrugada Zalo Reyes subió al escenario como parte de los artistas invitados a la primera jornada del Festival de Olmué, que transmite CHV.
Y no se bajó hasta 45 minutos más tarde agradecido por el recibimiento del público que anoche llegó hasta El Patahual en el marco de la versión 41 del encuentro folclórico.
Reyes, quien sufrió la amputación de uno de sus pies y una parálisis facial que lo mantuvo al margen de los escenarios, fue ovacionado por sus seguidores quienes esperaron casi cuatro horas el show del intérprete.
El músico, conocido también como "El Gorrión de Conchalí", repasó parte de sus grandes éxitos y bromeó con la gente sobre su estado de salud que lo obligó a permanecer cerca de 8 meses hospitalizado durante 2008.
La voz de Con una lágrima en la garganta apareció luego de la rutina de humor de Rupertina -que marcó el peak de rating de la noche con 25 puntos- y previo a la presentación de Ráfaga a cargo del cierre del espectáculo animado por Ivette Vergara y Leo Caprile.
Y aunque estaba programada una conferencia de prensa luego de su actuación, Reyes se excusó explicando que "estoy cansado y necesito dormir".
Para esta noche se esperan los shows Natalino, Quilapayún, Los Trukeros y La Sonora de Tommy Rey, mientras que mañana Joaquín Sabina será el encargado de la clausura del Festival que este año celebra los 200 años de la independencia de Chile buscando al compositor más popular de la música chilena.