El socialista José Luis Rodríguez Zapatero pidió hoy la confianza del Parlamento para asumir por segunda vez la presidencia del Gobierno español, con los objetivos de hacer frente con medidas inmediatas a la desaceleración económica y lograr la victoria definitiva, con la unidad de todas las fuerzas políticas, sobre ETA.
"Pido la confianza para impulsar una clara idea de España, un país próspero, unido y diverso, comprometido con la causa de la paz", señaló Rodríguez Zapatero en su discurso ante el Congreso de los Diputados (cámara baja) en la sesión que debe votar su investidura como jefe del Ejecutivo español.
El líder socialista se fijó el objetivo también de continuar en los próximos cuatro años "el crecimiento y prosperidad de España y para superar de la mano de empresarios y trabajadores la fase de desaceleración económica que atraviesa nuestra economía en el contexto mundial".
También pidió la confianza para "alcanzar mediante la unidad la victoria definitiva frente al terrorismo".
La organización terrorista ETA "solo tiene un destino, poner fin a su barbarie criminal definitivamente", señaló Zapatero, que reclamó la unidad de todas las fuerzas políticas españolas "para diseñar una estrategia antiterrorista de todos los grupos de la cámara".
MEDIDAS ECONOMICAS
En el plano económico, tras reconocer que las turbulencias financieras de los mercados internacionales y la escalada del precio del crudo, material primas y de algunos alimentos provocan incertidumbre, anunció la adopción de medidas "inmediatas" y también a "medio plazo" para hacer frente a la situación.
Para Zapatero, los buenos fundamentos de la economía española "son un buen amortiguador, pero no un muro que nos aisle", por lo que señaló que en esta legislatura habrá un panorama de crecimiento menor que en la anterior.
"No es un horizonte prolongado sino transitorio, por lo que los españoles deben tener la seguridad de que pasado ese paréntesis se reanudaran los parámetros anteriores", señaló.
Anunció que en la primera semana de su Gobierno pondrá en marcha la deducción de 400 euros prometida en su programa electoral y un plan de recolocación para los desempleados que hayan perdido su puesto de trabajo en el sector de la construcción.
También dijo que convocará a los agentes sociales para forjar un nuevo acuerdo económico y social que abarque al mercado de trabajo.
Pese a la desaceleración económica, Zapatero afirmó que su Gobierno mantendrá las políticas sociales, aumentará el salario mínimo y las pensiones más bajas y desarrollará leyes como la de ayudas a las personas dependientes y la política de igualdad entre hombres y mujeres.
EFE