El anuncio del Nobel de Literatura para Bob Dylan trajo consigo tantos elogios como críticas. Curiosamente, la cosa fue muy parecida hace 19 años, cuando el que ganaba el galardón más prestigioso de la literatura a nivel mundial era italiano Dario Fo. Actor, cómico, monologuista y director de teatro, murió hoy a la edad de 90 años. Recibió el premio de las letras en medio de una confusión parecida a la generada por el reconocimiento de Dylan y hoy, los dos comparten portadas en la prensa.
Los escritores y poetas chilenos también quisieron dar su punto de vista ante el polémico Nobel de Literatura para Bob Dylan. Entre los más contentos está el Premio Nacional de Literatura Raúl Zurita, quien para homenajearlo agazajará hoy a su gato que lleva el mismo nombre del creador de Like a Rolling Stone.
"Estoy tan emocionado y contento con el Nobel a Bob Dylan, el más extraordinario poeta norteamericano, que fue capaz de devolverle a la poesía la dignidad de lo antiguo, la poesía nace con la música, fundiéndolo con lo más presente de nuestro tiempo. Al premiarlo a él se premia simultáneamente a Violeta Parra y se inaugura un nuevo porvenir, así que esta noche me vestiré de gala y junto con mi mujer festejaremos como se merece a nuestro gato llamado Bob Dylan comprándole las más exquisitas golosinas y bocados que provee la alta cuisine para gatos. No podía ser menos".
Igual de contento se mostró Alberto Fuguet, el autor de Mala Onda (1991) no tuvo más que elogios para la decisión de la Academia Sueca:
"Creo que es un gran momento no sólo para la música; es la idea de que la literatura pop está a la misma altura de los escritores y poetas de renombre. Así hoy podría ganar Violeta Parra, más que Neruda. La academia el año pasado premió a la crónica, el periodismo; hoy premió el pop. Y a Estados Unidos y a los beat; se hace justicia con una tradición. Yo siento que aquí también se premia al cine, a los Coen (Balada del hombre común), y justo en el año de la muerte de David Bowie. Hay mucho involucrado. Y es lindo y jovial que todo el mundo sabe quién es Dylan y sube fotos a Instagram; lo conoce, no todos son expertos, pero sí saben lo suficiente y captan lo que es".
El poeta y librero de Metales Pesados, Sergio Parra, tiene una opinión parecida a la de Fuguet en cuanto a valorar el cambio de enfoque de los premios Nobel.
"Los tiempos están cambiando; el año pasado fue una cronista rusa (Svetlana Aleksiévich) y este año es Dylan, que para mí es merecido al cien por ciento. Uno de los grandes transformadores de la cultura popular. No son los Beatles, no son los Rolling Stones, ¡Es Bob Dylan!"
La autora de Impuesto a la carne (2010) y de Fuerzas especiales (2013), Diamela Eltit aplaudió de lleno el anuncio y dedicó sentidas palabras para homenajear la trayectoria y la influencia de Dylan.
Desde hace varios años Dylan ya estaba presente en diversos estudios y espacios literarios, por sus letras fundadas en la poética de sus imágenes. Repensó la trova como arma narrativa en una época convulsa que impulsaba nuevos giros ante sociedades soporíferas carcomidas por el imperio conservador. Dylan formó parte de una juventud múltiple que estaba hastiada de preceptos insensatos e inequidades sociales, raciales, sexuales. Cruzó las siempre tensas fronteras de los géneros y se impuso desde siempre como un poeta en el interior de la música, de la misma manera que lo hizo Serrat y, aquí mismo, Patricio Manns y su trova poética de la felicidad y del infortunio, premio Nobel de muchos de nosotros.
Pero hay algunos que no están tan convencidos, como es el caso del poeta Claudio Bertoni. El ganador del Premio al Mejor Libro del Año del CNCA en 2005 por Harakiri , piensa que dentro del espectro de músicos merecedores del Nobel de Literatura, antes de Bob Dylan está el canadiense Leonard Cohen.
"Me sorprendió mucho en realidad. Me gusta mucho Bob Dylan, me gustan mucho sus letras, pero puedo pensar en una decena de poetas gringos que se lo merecen más que él. Me gusta mucho Dylan, en el mundo del rock es insuperable, pero si entramos al mundo de la poesía… si tuviera que escoger, por ejemplo, entre Dylan o Leonard Cohen, en el mundo de la poesía, me quedo con Cohen."
El escritor Rafael Gumucio, quien hace poco publicó el libro de ensayos Contra la inocencia, comenta que hay algo de injusto en el premio, pero a la vez valora que se entienda que la literatura no solamente está en los libros.
"Estoy dichoso. Casi no lo he leído porque los he escuchado todo. Me parece bien que el jurado del Nobel haya entendido que literatura no es igual a libros. En realidad, los libros son un accidente en el mundo de la literatura. Se acabrán los libros y la literatura seguirá. Bob Dylan representa eso. Siempre estos premios tienen algo de injustos porque dejan fuera a autores que lo merecen, como Philip Roth o Nicanor Parra. Pero Dylan recoge la cultura popular norteamericana y rescata las raíces, tal como lo hizo nuestra Violeta Parra."
En el panorama mundial la cosa no es muy distinta. El escritor británico Salman Rushdie, a través de su twitter se declaró parte del bando de los elogios:
"De Orfeo a Faiz, canción y poesía siempre estuvieron estrechamente vinculadas. Dylan es el brillante heredero de la tradición del bardo. Excelente elección".
Por el contrario, el escritor escocés Irvine Welsh criticó duramente el veredicto de la Academia Sueca a través de la misma red social:
"Soy fan de Dylan, pero este es un desacertado premio nostálgico, arrancado de las rancias próstatas de seniles y balbuceantes hippies".