Columna de Alessio Arata: Scaleups: hacia una internacionalización que es posible

"Las fórmulas perfectas para la internacionalización de las scaleups no existen, pero sí podemos incidir en acciones para impulsarlas. Los liderazgos detrás de éstas requieren de buenos instrumentos de trabajo, así como una mayor consciencia en relación a los contextos que las rodean."



En Latinoamérica vender productos o servicios a países vecinos no es algo automático a pesar de las bajas barreras idiomáticas. En cierto que se han producido cambios positivos, si bien todavía a nivel empresarial no se observa una mentalidad global y una diversidad cultural que haga que la internacionalización sea un paso natural. Esta realidad nos sitúa ante un desafío que es muy relevante para las scaleups, y que justamente se vincula con la expansión de sus espacios de influencia.

El primer desafío de las scaleups está en tener una noción clara sobre el valor de la internacionalización. Un elemento fundamental es impactar, pero para poder expandirnos tenemos que estar conscientes sobre la relevancia de trascender hacia nuevas zonas geográficas, es decir, una línea de acción que permita validar la propuesta de valor de las scaleups ante distintos mercados, reflejando su potencial de crecimiento, y en ecosistemas más desarrollados. Por ejemplo, las scaleups tecnológicas son generadoras de nuevas riquezas, no sólo para los emprendedores que están detrás sino también para el país. Estamos hablando de una riqueza sustentable, basada en conocimiento y de alto valor agregado, y que con los incentivos correctos puede ser una fuente importante de movilidad y bienestar social.

Pero para transformarnos en scaleups con una mirada internacional, tenemos que interiorizar y hacer realidad diversos factores, siendo los principales el talento, financiamiento y tiempo necesario para lograr la madurez requerida. En la medida en que estos recursos actúen en forma integral, la visibilidad y alcance de un proyecto será mayor.

En cuanto al tiempo, me refiero también a tener la capacidad para encontrar el “timing” preciso. Todas las scaleup siempre pueden consolidarse más localmente, fortaleciendo los atributos de sus productos para que sean cada vez más atractivos antes de emprender un proceso de expansión. Dichos factores incrementan la tasa de éxito, pero también aumenta los costos de oportunidad y riesgo asociado con la entrada de nuevos actores. Por lo tanto, la clave está en identificar el momento más apropiado.

Las fórmulas perfectas para la internacionalización de las scaleups no existen, pero sí podemos incidir en acciones para impulsarlas. Los liderazgos detrás de éstas requieren de buenos instrumentos de trabajo, así como una mayor consciencia en relación a los contextos que las rodean. Las scaleups necesitan de herramientas que motiven y faciliten la internacionalización temprana de nuevos emprendimientos. El foco debe estar en temas como financiamiento, acceso a mercados, desarrollo de talento global y, en general, en la articulación de un ecosistema donde empresas con alto potencial de crecimiento se relacionen tanto con sus pares como con entidades públicas y privadas, nacionales e internacionales.

También está el rol del estado, el cual debiese ir más allá de la entrega de instrumentos específicos. Es vital que éste proporcione un ambiente atractivo para el desarrollo de nuevos negocios, incentivando el crecimiento de las empresas ya existentes y a talentos que prefieran a Chile como país de partida para sus nuevas scaleups. La clave está en contribuir, desde diversos actores, para el desarrollo de ecosistemas más competitivos. Así, los emprendedores identificarán a Chile como una plataforma geográfica válida y abierta al mundo para sus escalamientos hacia otras partes del mundo.

La capacidad de internacionalización de las scaleups no responde sólo a acciones individuales, sino es también resultados de un esfuerzo colectivo en torno a ecosistemas de trabajo mucho más amplios. Es así que hoy, más que nunca, se requiere de redes de apoyo y partners como universidades, centros de investigación y grandes empresas. Sólo de esta forma, y teniendo presente los ámbitos anteriormente descritos, desarrollaremos scaleups más competitivas y atractivas, identificándolas como generadoras de conocimiento, tecnología y soluciones de alto impacto para la sociedad.

* El autor es emprendedor Endeavor y fundador de RMES.