Columna de Francisca Jünemann: Diversidad de género en los directorios
Si nuestro país quiere apurar el paso hacia una mayor equidad de género, debe cambiar de modelo. Y el que promovemos en ChileMujeres es el de cuotas recomendada con método “comply or explain” que conlleva el deber de reportar al regulador si cumple la cuota que éste le sugiere o bien, debe explicarle por qué no lo hace.
Las transformaciones sociales son profundas y aceleradas y éstas no se están reflejando con el mismo nivel de profundidad y celeridad en el mercado laboral: bajos niveles de participación femenina, desigualdad salarial, ausencia de culturas de adaptabilidad, de corresponsabilidad parental y de prevención del acoso, y escasas posibilidades de desarrollo de las mujeres a todo nivel en la organización.
Como fundación, la diversidad de género en los directorios nos preocupa porque tenemos la convicción que las más profundas transformaciones en las empresas nacen y terminan en el principal órgano del gobierno corporativo. Si queremos acelerar los cambios, se necesitan más mujeres con el poder de tomar decisiones.
Con este propósito, Fundación ChileMujeres y la OIT lanzamos este mes el estudio “Modelos de diversidad de género en los directorios”. En él, analizamos los distintos modelos que los países han ido adoptando para aumentar la participación de mujeres: el de cuotas obligatorias, el de cuotas recomendadas por los gobiernos con el método cumplir o explicar (“comply or explain”) y el de autorregulación por las empresas.
En el análisis agrupamos los países según los modelos para comparar indicadores de género. En promedio, los países con cuotas obligatorias tienen un 39% de mujeres en los directorios; los países con cuotas recomendadas con el deber de cumplir o explicar, un 26%; y los países donde las empresas se autorregula, sólo alcanzan el 15%. Así, a mayor compromiso de los Estados, mayor la participación de mujeres en el principal órgano de los gobiernos corporativos.
Los únicos países que llegan o superan el 40% de mujeres en directorios de empresas son aquellos que tienen ley de cuotas obligatorias: Islandia, Francia y Noruega un 46%, 45% y 40% respectivamente. Y seis de los que han adoptado el modelo de cuota recomendada con “comply or explain”, tienen más del 30% de mujeres en los directorios. Ningún país donde las empresas privadas se autorregula alcanzan el 30%, modelo al cual adhieren Chile.
Por lo tanto, si nuestro país quiere apurar el paso hacia una mayor equidad de género, debe cambiar de modelo. Y el que promovemos en ChileMujeres es el de cuotas recomendada con método “comply or explain” que conlleva el deber de reportar al regulador si cumple la cuota que éste le sugiere o bien, debe explicarle por qué no lo hace.
Nos gusta porque simplifica, acelera y asegura la aprobación del modelo (basta con una norma de la CMF, sin tener que pasar por el debate legislativo en el Congreso con la dilación e incertidumbre que implica); es efectivo en alcanzar la meta base de equilibrio de género del 30% sin requerir gradualidad en la implementación; y porque respetando la libertad empresarial, las grandes empresas -que son las que más responsabilidad tienen- cumplirán la recomendación, si no es por convicción, al menos por imagen corporativa y percepción del mercado.
Necesitamos en lo inmediato, que el Estado aporte por medio del regulador (CMF) a impulsar más mujeres en el espacio donde se pueden hacer cambios rápidos y profundos en las condiciones laborales, que permitan lugares de trabajo justos, donde las personas puedan ingresar y desarrollar todas sus capacidades y sus talentos; independiente de alguna medida legislativa que esté analizando el Gobierno a mediano plazo.
Mientras tanto, que las empresas privadas tomen el ejemplo de las empresas públicas al asumir voluntariamente la paridad en los directorios, sin necesidad de una ley que las obligara.