Columna de Horacio de la Peña: Radiografía al presente del tenis chileno
Para tomar conciencia de la magnitud de lo que está pasando entendamos que nuestros jugadores Nicolás Jarry, Tomás Barrios, Christian Garin y Alejandro Tabilo están 19, 76, 86 y 92 en la carrera del año, respectivamente. Y todos tienen muy poco que defender de aquí a final de año. Lo más importante es que son cuatro jugadores a quienes les quedan por lo menos siete años de carrera, por lo que nos da un futuro muy promisorio.
Hay que remarcar eso, porque muchas veces no se pone el peso real a la situación. Este año, los tenistas chilenos ganaron dos torneos ATP, tres Challenger y finalmente tendremos representantes en los torneos más importantes que se vienen: US Open, Masters 1000, Copa Davis y chances de varias medallas en los Panamericanos.
Además, cuando uno analiza el nivel de estos jugadores, no solo hay que ver el ranking, sino que también qué pasa cuando se cruzan con los mejores. Este año Nicolás le ganó a Zverev, Ruud y Tsitsipas, además de competir mano a mano con los protagonistas del circuito.
También hay que destacar que antes de su lesión, Garin estaba a un nivel para ilusionarnos con su retorno a la parte alta del ranking. Le había ganado a Ruud, Sonego y Tommy Paul.
Tomás Barrios y Alejandro Tabilo, por su parte, no paran de ganar Challenger y compitiendo cuando les toca jugar en las grandes ligas. Han mejorado mucho su nivel de tenis, su físico y aguantando mucho mejor la presión.
Todo eso no es casualidad, ya que desde la llegada del circuito Dove Men Care a la región, los tenistas sudamericanos no solo han mejorado su ranking, sino que también, gracias a poder viajar con sus equipos de trabajo, su tenis está siendo competitivo a nivel mundial.
Muy poca gente entiende lo que sufre un tenista sudamericano al desprenderse de sus seres queridos por periodos muy largos, dando vueltas por todos los continentes completamente solos.
La familia y los afectos son tan importantes como los equipos de trabajo, algo que nuestro circuito ha podido unir. Es una combinación explosiva, que se ve reflejada en los rankings tan solo a tres años de haber comenzado.
Lo más lindo es que no solo ha funcionado con los tenistas chilenos, ya que los grandes referentes que tiene el tenis sudamericano hoy en día salieron de nuestro circuito. La lista es enorme y el cariño de estos chicos y sus familias con nuestro circuito es increíble.
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