Columna de Iris Boeninger: Uruguay elige
La elección presidencial del próximo domingo 27 de octubre en Uruguay tiene varias particularidades. Pepe Mujica, estando muy delicado de salud, asistió al acto de cierre de campaña del candidato del Frente Amplio. “Soy un anciano que está muy cerca de emprender la retirada de donde no se vuelve, pero soy feliz porque están ustedes, porque cuando mis brazos se vayan habrá miles de brazos sustituyendo la lucha y toda mi vida dije que los mejores dirigentes son los que dejan una barra que los supera con ventaja”, le dijo a los miles de jóvenes presentes. El impacto político que puede tener que un hombre como Mujica se esté despidiendo de la vida es importante. El candidato Yamandú Orsi es del partido MPP, y su líder es Pepe Mujica.
La probabilidad de que haya segunda vuelta presidencial es alta, ya que se debe ganar con 50% más uno para triunfar en primera. Se espera una elección muy pareja. Últimos sondeos indican que un 44% votaría por Yamandú Orsi del Frente Amplio, el 23% por el candidato del Partido Nacional Álvaro Delgado y el 15% por el candidato Andrés Ojeda del Partido Colorado. Ojeda es una de las principales sorpresas de la actual campaña electoral, que había empezado con una baja intención de voto. Fue el centro de atención durante gran parte de la actual campaña con un discurso basado en “lo nuevo”, mostrándose como el distinto de todos los postulantes por alejarse del camino más trillado, y está teniendo llegada. La coalición multicolor gobernante obtendría entonces un 43% sumando a tres partidos más chicos. El domingo se sabrá cuál de los candidatos de esta coalición será el que pasa a segunda vuelta y si recibe el total apoyo de la coalición.
Las últimas mediciones le dan un índice de aprobación del 50% al Presidente Lacalle Pou, luego de cinco años de gestión, que no está pasando totalmente a sus candidatos.
Esta elección se caracteriza por una situación adicional compleja. Ese mismo día, los uruguayos deberán votar dos plebiscitos: uno para ir marcha atrás con la reforma de pensiones que cuenta con un apoyo del 41% mayoritariamente del Frente Amplio. El segundo referido a la seguridad, apoyado por el oficialismo, busca permitir allanamientos nocturnos y cuenta con un apoyo del 51%.
El Presidente Lacalle Pou ha explicado los daños que tendría para el país ir marcha atrás con la reforma de la seguridad social. Por su parte Pepe Mujica dijo: “Va a armar un caos en el país”. Plena coincidencia en una materia tan importante. Es clave recordar que la reforma de pensiones elevó la edad de jubilación para hombres y mujeres de sesenta a sesenta y cinco años y este plebiscito busca volver atrás, lo que tendría impacto fiscal y no le daría sustentabilidad a la seguridad social.
El ambiente político del país se intensifica con la incertidumbre sobre el resultado y las implicancias de los plebiscitos en juego. La campaña se ha caracterizado por la escasez de temas, ya que el espacio del proyecto de país futuro lo tapó la campaña del plebiscito por la seguridad social.
La campaña real va a empezar en la segunda vuelta. Se está guardando mucha artillería para esta instancia. Campaña del miedo, nombramientos de otras figuras, presentación de posibles gabinetes sumado al impacto de los plebiscitos si sale aprobados.
Por Iris Boeninger, economista, exembajadora de Chile en Uruguay