Columna de Jeanette Vega: El futuro de la salud: La revolución que trae la inteligencia artificial
Mientras Chile debate sobre la reforma al sistema de salud, una revolución silenciosa está transformando la medicina global. La convergencia entre inteligencia artificial (IA) y transformación digital no solo está redefiniendo la atención de salud, está creando, por primera vez, la posibilidad de pasar de sistemas que tratan enfermedades a sistemas inteligentes que mantienen la salud. Esta revolución tecnológica nos ofrece, por primera vez, la oportunidad de pasar de sistemas diseñados para tratar enfermedades a sistemas inteligentes enfocados en mantener la salud de las personas.
Imaginemos Chile 2040: una madre en Putre consulta desde su celular con un asistente de salud digital sobre la infección respiratoria de su hijo. En Santiago, adultos mayores usan sensores implantados que analizan constantemente su biología, ajustando medicamentos y coordinando con médicos mediante videoconsultas personalizadas, anticipándose a problemas de salud.
En Chiloé, enfermeras de atención primaria, apoyadas por IA, diagnostican y tratan condiciones que antes requerían costosos viajes a especialistas. La realidad aumentada en consultas médicas permite a los pacientes visualizar cómo sus decisiones diarias impactan su salud, mostrando los efectos de la dieta y ejercicio en su cuerpo
Y esto no es ciencia ficción ni una visión lejana: la revolución ya comenzó. Los sistemas de inteligencia artificial como ChatGPT no solo igualan, sino que superan a médicos especialistas en precisión diagnóstica y en exámenes de certificación médica en diversos países. Sorprendentemente, estos sistemas demuestran niveles de empatía que rivalizan con los mejores profesionales de salud, derribando el mito de que la tecnología deshumaniza la atención. La IA está transformando la experiencia de la atención en salud, haciéndola más accesible, personalizada y humana.
Sin embargo, el verdadero cambio revolucionario no está en reemplazar médicos con tecnología. Está en transformar los servicios de salud, pasando de un modelo reactivo centrado en hospitales y en tratar enfermos a uno preventivo centrado en las personas y en generar salud.
Para hacer esto realidad, necesitamos más que tecnología. Necesitamos voluntad política para reimaginar nuestro sistema de salud, inversión en investigación e innovación, infraestructura digital, y un marco regulatorio que equilibre innovación con seguridad. Necesitamos preparar a nuestros profesionales de la salud para trabajar con estas nuevas herramientas y, sobre todo, necesitamos poner a las personas y comunidades al centro del diseño.
Chile ya está dando pasos decisivos en esta dirección. La semana pasada, ante más de 400 representantes de la industria, sector público, academia y sociedad civil, se presentó la iniciativa Transforma Salud, un esfuerzo conjunto de Corfo y los ministerios de Ciencias y Salud que marca un hito en innovación en salud. La visión es ambiciosa pero alcanzable: posicionar a Chile como referente global en innovación en salud al 2034.
El programa se sustenta en dos ejes estratégicos fundamentales: primero, la adopción de soluciones innovadoras para optimizar la gestión, diagnóstico y tratamiento, garantizando calidad y acceso equitativo. Segundo, el desarrollo y exportación de soluciones tecnológicas basadas en IA, biotecnología y genómica, donde Chile puede dar un salto cualitativo desarrollando soluciones nativas digitales para mantener la salud y prevenir enfermedades.
El potencial existe y hay múltiples ejemplos visibles: ThyroidPrint, un test molecular desarrollado por la UC evita cirugías innecesarias en el 88% de pacientes con sospecha de cáncer de tiroides. En el ámbito de desarrollo de aplicaciones, Eniax y Ceo-AI están revolucionando la gestión de listas de espera con tecnología que ya ha logrado reducir significativamente los tiempos de espera en centros privados y varios servicios de salud. Buho, que comenzó como una startup chilena y hoy opera en múltiples países, está transformando el acceso a medicamentos utilizando inteligencia artificial para buscar los mejores precios para recetas médicas con múltiples medicamentos y enviarlos a domicilio.
Estos ejemplos demuestran que Chile puede desarrollar ciencia de alto nivel y transferirla exitosamente al mercado. Nuestro ecosistema de innovación creciente y talento emprendedor probado nos posiciona idealmente para desarrollar tecnologías que resuelvan desafíos locales y puedan exportarse globalmente. Y, nuestro sistema de salud, construido sobre décadas de atención primaria sólida, es el fundamento perfecto para esta revolución.
A través de una colaboración sin precedentes entre el sector público, privado, la academia y la sociedad civil, Transforma Salud está sentando las bases para este futuro: desarrollando capacidades en IA médica, repensando la regulación para facilitar la innovación, y construyendo un ecosistema que permitirá implementar estas soluciones a escala nacional.
El desafío es grande, pero la oportunidad es aún mayor. La pregunta no es si la revolución digital llegara a Salud, sino cómo nos preparamos para ella. ¿Seremos protagonistas de este cambio o simples espectadores?
Por Jeanette Vega, presidenta Comité Ejecutivo Transforma Salud
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