Columna de Marcelo Contreras: Tejados de vidrio

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La pregunta es si los artistas y los rostros de televisión son modelos de conducta. Cuando se predica con la moral del padre Gatica -el caso de Camila Gallardo-, el tejado se hace trizas de inmediato.



Esta es una obra con reparto estelar en desarrollo bajo pandemia. Primer acto protagonizado por Camila Gallardo en enero, al ser detenida por una fiesta clandestina en su departamento en un lujoso hotel. En el paredón de las redes sociales fueron oportunamente citados sus mensajes aleccionadores de 2020 llamando a respetar las cuarentenas. Segundo acto en febrero, cuando sorprenden a Pablo Chill-E en la grabación de un video junto a 44 personas en un galpón. La ascendente estrella trap ya había causado polémica el mes anterior por un sorpresivo show en Puente Alto sin mascarillas ni distancia social. Ante las críticas, contraatacó: “el virus es pa’ los pobres nomás, igual que la cárcel”.

En el tercer acto despunta el insólito aprecio de Tea Time por una de las instituciones más cuestionadas en la actualidad como Carabineros, en desesperado intento por revertir una detención junto a cinco personas. En redes fue acribillado por el peso de viejos versos desafiando a la autoridad. Kiddtetoon en el cuarto acto, al ser aprehendido en un departamento con 19 personas. Gracias a Twitter nos enteramos que la ex intérprete pop Coni Lewin no conoce al cantante de trap, pero acusa tongo en el procedimiento sin mediar pruebas. Es el momento del humor en la obra.

La última escena incluye a la periodista Paulina de Allende-Salazar interrogando a José Antonio Neme en su debut en el matinal de Mega por viajar a Estados Unidos en enero, el país con más casos y muertes debido a esta crisis. El periodista se defendió apelando al cumplimiento de la norma de su viaje (del cual publicó fotos en Instagram), y marcando distancia con aquellos que eran sorprendidos en fiestas.

“Dejan subir 500 weones con plata en un avión, pero no dejan hacer un evento gratis pa’ los niños de la población”, reclamó Pablo Chill-E al ser cuestionado por el número en Puente Alto durante el verano, cuando se permitieron traslados y vacaciones.

La pregunta es si los artistas y los rostros de televisión son modelos de conducta. Cuando se predica con la moral del padre Gatica -el caso de Cami-, el tejado se hace trizas de inmediato. La posición de Neme también resulta frágil. El periodista rediseñó un perfil opinante sobre la autoridad y el poder, funcional al proyecto de La Red para seducir a un público opositor al gobierno. Despedido hace poco más de un año de Mega por mala evaluación en la conducción de noticias, regresó triunfante a la estación para competir con Julio César Rodríguez por el título defensor-del-pueblo, en horario matinal. Construir un personaje proclive al dedo aleccionador requiere conducta intachable. “Obviamente lo reconsideraría en las condiciones de hoy”, reconoció cuando fue abordado en Mucho Gusto.

Las actuales cifras arrojan un muerto por Covid-19 en Chile cada ocho minutos, y una notoria alza de casos en la población entre 20 y 34 años. Seguimos sometidos a una situación complejísima que requiere colaboración unánime, una responsabilidad que recae con mayor fuerza en quienes gozan de micrófono y vitrina.